Las especulaciones respecto a un cambio de gabinete, ad portas del segundo año de Gobierno del Presidente Gabriel Boric, no han cesado, pese a que varios ministros y el propio Mandatario han descartado que existan «señales» en torno al tema. Esto, pese a las presiones que han surgido, incluso desde el propio oficialismo, porque existan ajustes.

La ministra del Interior, Carolina Tohá -la segunda mejor evaluada en la encuesta Criteria después de Mario Marcel-, volvió a desdramatizar el tema esta mañana y evitó referirse a posibles «gestiones» para un ajuste ministerial. Por el contraste, según destacó, este segundo año marcará nuevos desafíos y una «agenda nueva» para el Ejecutivo, entre ellas, las relacionadas con materia económica.

En conversación con Tele13 Radio, Tohá reconoció que siempre en este tipo de procesos los miembros de los partidos políticos «se ponen muy nerviosos», puesto que existen quienes «creen que pueden haber nuevos espacios para personas que se pueden potenciar; los que tienen temor de perder los espacios, defender ciertos roles, y en general el mundo de comunicaciones con esto es un éxtasis».

«Y al final, lo que creo que es relevante para la gente, y lo que sí o sí pasa, independiente de las decisiones del Presidente con motivo de su gabinete, es que entrando al segundo año de Gobierno vienen desafíos nuevos, es una nueva etapa, es necesario enfrentarla, y para eso hay que hacer ciertamente ajustes que no tienen que ver con el gabinete, sino con mirar el tiempo que nos viene por delante», agregó la ministra.

En esa línea, subrayó que en base a los datos económicos que se conocieron ayer -donde el Imacec registró una sorpresiva expansión interanual de 0,4%-, «el año pasado fue bien particular, estaba marcado por una inminente crisis, por un alza muy grande de la inflación, por un riesgo de una recesión que se anunciaba que iba a ser tremenda; este año parece que esos escenarios tan catastróficos no se dieron, pero sí acumulamos una inflación grande; pero el año que viene es distinto desde el punto de vista de esos desafíos».

Lo anterior, profundizó la ministra, porque este año apunta a «la recuperación de la economía, mantener el timón firme para que la inflación no rebrote, entonces ciertamente no podemos seguir repetirnos lo que fue el 2022, sino que es tomar los desafíos de 2023 (…) entonces viene una nueva agenda sí o sí en esa materia y creo que desde el punto de vista de la opinión pública, eso es harto más importante que el ajuste, que el nombre, o el partido este u otro, que al fin de cuentas es un tema que convoca a la gente de los partidos políticos».

Sexto retiro: «un fantasma que hay que expiar»

En la misma línea, al ser consultada por un eventual «sexto retiro», Tohá sostuvo que para el Gobierno aquello es visto «como un fantasma que hay que expiar». Esto, porque «retrocederíamos sobre lo andado (…) si se hubieran hecho los retiros que se intentaron el año pasado, no estaríamos con la situación que estamos ahora. Estaríamos con la inflación descontrolada».

«En segundo lugar, apuntaríamos en la dirección incorrecta porque si hay personas que requieren apoyo en este año, no son las que se van a beneficiar del retiro, son otras; las que justamente las que no tienen el retiro, las personas más pobres de nuestro país, las que más han sido afectadas con la crisis económica, no se benefician para nada, pero sí pagan las consecuencias, porque la inflación les golpea el bolsillo, entonces sería, además, una medida regresiva», complementó.

En tercer lugar, la ministra recordó que se trataba inicialmente de una medida «excepcional» en medio de la pandemia, «bueno, la excepción ya pasó, ya no estamos en pandemia, hay ayudas, y a lo que tenemos que apostar es que la economía también se recupere por si sola, y no es necesario seguir en esa excepcionalidad. Desde todo punto de vista sería muy dañino que se cayera en esa tentación».

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