En los últimos días, la prensa británica ha recogido varios rumores que anunciarían el quiebre del príncipe Harry y Meghan Markle. Y es que, después de todos los golpes y remezones desde que empezaron su relación, todo apunta a que no pudieron soportar las tensiones que les puso la realeza encima y que pronto estaremos escuchando sobre un eventual divorcio.
Meghan estaría decidida a seguir mirando adelante, mientras que el príncipe podría estar sumido en una profunda nostalgia y reconsiderando su vida en los palacios, pero “dudando” de tomar una decisión por sus pequeños hijos.
¿Será este el fin del Megxit?
Los rumores que sustentan la teoría del divorcio de Harry y Meghan
La teoría que más ronda es la de Meghanaissance, un nombre compuesto de Meghan y Renacimiento (Renaissance en inglés), que apunta al “renacimiento de la duquesa”.
Según establece, Meghan Markle estaría intentando salvar su propia reputación, con la mira en convertirse en una persona influyente, mientras que Harry prefiere la privacidad, además que la distancia física y emocional con su familia pareciera estar poniéndolo nostálgico y repensando las decisiones que tomó con su esposa sobre alejarse de Buckingham.
Las evidencias de la actitud de Markle serían, según la prensa británica, polémicas como la que sucedió cuando unos agresivos paparazzis persiguieron a la pareja e hizo que su nombre resonara en varios medios de comunicación.
Pero Harry estaría en “absoluto desamparo” desde la coronación de su padre, el rey Carlos III. El medio British Royal Family News publicó que días antes, Meghan le había dado un ultimátum para que eligiera entre la familia real o la que construyeron juntos en California, pues la fecha coincidía con el cumpleaños de su primer hijo, Archie.
El príncipe decidió volar a Reino Unido, pero no se le permitió vestir su traje militar, unirse al resto para saludar del balcón y tampoco disfrutar del almuerzo posterior a la celebración.
Y sería ahora que todo lo que dijo en entrevistas y en su libro En la sombra le está “pasando la cuenta” y está enterándose de las consecuencias que tuvo su renuncia como miembro de la realeza. Según otros medios locales, Harry incluso tendría una habitación en una gran cadena hotelera -cercana a su domicilio familiar en California- donde puede tomar respiros de su relación.
Harry y Meghan: dos personalidades muy distintas
Los biógrafos suelen describir a Meghan como una persona manipuladora, misteriosa pero también narcisista. En cambio, a Harry suelen verlo como una imagen de orfandad, débil, poco estable y con mala salud mental, sobre todo después de la muerte de la princesa Diana, su madre.
Son muchas los análisis y las críticas de que Meghan habría tomado un papel de “sanadora, guía espiritual y maestra de vida” con su esposo y que incluso lo habría enemistado con su hermano William y la Corona a propósito.
Sin embargo, según Anna Pasternak, la autora de The American Duchess, The Real Wallis Simpson, la personalidad de Harry es más similar a la de su madre, mientras que William es más parecido al rey Carlos, por lo que habrían tenido problemas entre ellos más allá de la influencia de Meghan.
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