Mucha gente no sabe comenzar un día sin tomarse una taza de café, o dos, un zumo de naranja o un buen croissant. Son desayunos rápidos y fáciles. Por la mañana no tenemos tiempo para mucho más. Sí es cierto que el café, gracias a su contenido en cafeína, nos va a dar un empuje de energía muy útil para hacer las primeras tareas.
Sin embargo, esta energía aportada por la cafeína no suele durar más que unas horas. A medio día vamos a necesitar otro café, y después de comer otro, y por la tarde otro. No es un método muy viable a la hora de tener una energía continuada durante todo el día. Por ello, hay ciertos alimentos que puedes probar para desayunar si quieres tener más energía sin necesidad de tomar café.
Lo primero que puedes probar es a desayunar cereales integrales, pan integral o avena. Es importante que se trate de pan o cereales integrales, ya que la fibra de estos y los hidratos de carbono complejos aportan energía lentamente, mientras que la de los panes blancos y sus hidratos de carbono simples lo que hacen es generar un pico de energía que luego desaparece.
Los cereales son un asunto algo complicado, puesto que la mayoría viene con muchos azúcares añadidos. Lo mejor es elegir cereales integrales sin azúcar. Si lo prefieres, también puedes comenzar el día con semillas de chía. Se pueden preparar con leche o con yogur la noche antes, para que estén tiernas a la hora de desayunar. La chía aporta mucha energía repartida durante el día y fibra.
Yogur, excelente manera de comenzar el día
Los yogures griegos son un alimento contundente, rico en proteína (el doble que un yogur normal) e ideales para afrontar la mañana. Lo mejor es elegir un yogur griego sin azúcar añadido. Para aplacar su acidez, puedes mezclarlo con nueces y con unos dátiles o frutos rojos.
| Una mezcla de yogur, cereales y fruta será la combinación perfecta comenzar el día Por supuesto, la fruta es ideal para empezar bien el día.
Tiene muchas vitaminas, minerales, y fibra soluble, así como azúcares naturales que te aportan energía. Cualquier fruta será perfecta para comer en el desayuno, ya sea entera o en batido (nunca licuada, porque se pierde el aporte de fibra). Las más recomendables son las manzanas, las peras, las frambuesas, los arándanos, las moras y las fresas.
Por último, puedes comer huevo cada mañana para recibir un aporte extra de energía y proteína. También es un alimento que aporta vitaminas B12 y B6, esenciales para la producción de energía del cuerpo. No pasa nada por comer un huevo al día, ya sea duro o revuelto, mezclado con unas verduras.
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