“Guillermo Teillier murió como un hombre digno, orgulloso de la vida que había vivido y hoy día cuando estamos próximos a conmemorar 50 años (del Golpe de Estado) hay otros que mueren de manera cobarde para no enfrentar a la justicia. Y me parece que ahí hay diferencias, que son humanas, incalculables”.

Esa fue la polémica comparación que hizo el Presidente Gabriel Boric el martes en la sede del Congreso Nacional en Santiago, tras asumir la guardia de honor del féretro del líder del Partido Comunista (PC) Guillermo Teillier.

Horas antes de esas declaraciones, se conoció que el retirado brigadier del Ejército Hernán Chacón Soto se quitó la vida luego que personal de la Brigada de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones llegara a su departamento en Las Condes para detenerlo. El lunes 28 de agosto el militar fue condenado a 25 años de cárcel como autor de los homicidios y secuestros del cantautor y director teatral Víctor Jara y del director de prisiones del gobierno de Salvador Allende, Littré Quiroga, crímenes de lesa humanidad cometidos tras el Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.

Álvaro Guzmán Valenzuela, otrora general de Brigada del Ejército y presidente del Cuerpo de Generales y Almirantes en Retiro de la Defensa Nacional, emitió un comunicado a nombre de la organización criticando las expresiones del Mandatario.

“Con profundo dolor e incredulidad hemos escuchado al Presidente de la República Gabriel Boric F., proferir una grave e incomprensible ofensa en contra del general Hernán Chacón Soto (Q.E.P.D.), por la dramática decisión adoptada de quitarse la vida, ofensa que la infiere además en contra de su viuda, hijos y nietos en un momento doloroso y de particular sensibilidad”, señala el texto.

Asimismo, se asegura que “Chacón enfrentó el juicio a que fue sometido con dignidad y hombría durante un extenso periodo, bajo un sistema procesal que fue abolido en el país hace más de 20 años dados por su carácter inquisitivo y por no otorgar las garantías del debido proceso”.

En esa línea, se plantea que “la sentencia aplicada de 25 años, constituye una pena de muerte”, al considerar los 86 años de edad del militar condenado.

“Difícil resulta comprender el que se pida respeto y comprensión sobre las legitimas visiones respecto de nuestro pasado reciente, cuando quien dirige los destinos del país ofende de manera pública la memoria de un ser humano, en los mismos instantes en que lamenta la pérdida de otro ser humano cercano a sus ideas y sensibilidad política”, se argumenta.

Al cerrar la declaración se indica que el Cuerpo de Generales y Almirantes en Retiro de la Defensa Nacional manifiesta al Presidente de la República “que la necesaria paz social e indispensable sana convivencia nacional que el país requiere alcanzar, no se logrará mientras persista un ambiente de descalificación y rencor, más aún si éste proviene de la máxima autoridad institucional país”.

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