Bill Gates rompe su rol habitual y se pone personal, compartiendo algunos detalles y sentimientos de lo que vivió como jefe de Microsoft hace casi tres décadas cuando presentó por primera vez ante el mundo el Sistema Operativo Windows 95.
Hay un antes y un después del lanzamiento de esta plataforma. Quienes tuvimos la oportunidad de utilizar una computadora antes del surgimiento de los sistemas operativos con interfaz gráfica recordamos perfectamente la sensación de dar un salto cuántico cuando pasamos de la pantalla de comandos y texto de MS-DOS (conocido ahora como Símbolo de Sistema) a Windows 3.1.
Pero ese era sólo el principio. El lanzamiento de Windows 95 fue uno de los momentos más importantes en la historia de Microsoft y de absolutamente toda la industria.
El botón de inicio, la barra de tareas, el explorador de archivos y la capacidad de navegar por una red de datos externa muy nueva, que apenas era conocida en aquel entonces como internet, fueron un parteaguas que dejaron profunda huella.
Cada uno de estos elementos sigue presente y ahora el ejecutivo-filántropo se ha abierto sobre el asunto.
Bill Gates se pone sentimental y comparte recuerdos sobre el lanzamiento de Windows 95
A través de su cuenta personal oficial en X, antes conocida como Twitter, Bill Gates celebró el 28 aniversario del lanzamiento de Windows 95 con un video legendario de aquel momento y una serie de comentarios a medio camino entre el chiste y el sarcasmo.
“Algunos recuerdos se quedan contigo para siempre. Otros te siguen por Internet desde hace 28 años. Feliz cumpleaños.”
Es lo que comentó Gates acompañando la publicación con un clip de un momento que para muchos es historia pura que enmarcaba el furor por el lanzamiento de un sistema operativo que cambiaría la sociedad y la industria.
Cómo Bill Gates se convirtió en un meme viral antes de que existieran
Bill Gates, como cofundador y director ejecutivo de Microsoft, fue el principal impulsor y responsable de este proyecto, que supuso un gran desafío técnico y comercial.
El sujeto en sí dedicó varios años a supervisar el desarrollo de Windows 95, que se retrasó en más de una ocasión por problemas de compatibilidad y estabilidad. Dos elementos que hasta la fecha siguen siendo factores de conflictos con cada nueva encarnación.