Los fiscales federales están escudriñando los beneficios personales que Tesla podría haber proporcionado a Elon Musk desde 2017 -más de lo que se sabía hasta ahora- como parte de una investigación criminal que examina asuntos que incluyen una casa propuesta para el presidente ejecutivo.
La Fiscalía Federal para el Distrito Sur de Nueva York también ha buscado información sobre transacciones entre Tesla y otras entidades relacionadas con el multimillonario, dijeron personas familiarizadas con la investigación. Los fiscales han hecho referencia a la participación de un gran jurado.
La nueva información indica que los fiscales federales tienen un interés más amplio en las acciones de Musk y Tesla de lo que se sabía anteriormente y que están persiguiendo posibles cargos criminales. El Wall Street Journal reveló el mes pasado de que el Departamento de Justicia de EE.UU. está investigando el uso de recursos de la compañía Tesla en un proyecto secreto que fue descrito internamente como una casa para Musk.
La iniciativa se conocía en el seno del fabricante de automóviles como “Proyecto 42″, y los planes preveían la construcción de un amplio edificio de cristal cerca de la fábrica y la sede central de Tesla en Austin.
La Comisión de Bolsa y Valores ha abierto otra investigación civil sobre el proyecto, según ha informado el Journal.
En X, la plataforma de redes sociales antes conocida como Twitter, Musk ha dicho que no hay ninguna casa de cristal “construida, en construcción o planeada”. No se refirió a trabajos o planes anteriores; ni él ni sus representantes han respondido a las peticiones de comentarios.
El año pasado, Musk estudió la posibilidad de construirse una casa en una granja de caballos al otro lado del río Colorado, frente a la fábrica conocida como Giga Texas -y se reunió con un arquitecto para hacer una lluvia de ideas sobre el diseño-, pero “aplazó la construcción”, escribió Walter Isaacson en una biografía autorizada del multimillonario publicada este mes. En un momento dado, de acuerdo al libro, Musk sugirió que el diseño podría incorporar un fragmento de cristal que emergiera de un lago.
El Journal habló con varias personas sobre Tesla y las investigaciones del gobierno para este artículo.
Una de las cuestiones que los fiscales están examinando es si Tesla divulgó adecuadamente los beneficios que Musk podría haber recibido. Los abogados internos o externos suelen encargarse de estas declaraciones. En Tesla, Musk ha guiado en ocasiones personalmente qué información revelar a los accionistas. No se pudo saber si ese fue el caso de los beneficios que los fiscales están examinando. Tesla ha señalado que, por lo general, no ofrece bonos ni otros beneficios personales a sus altos ejecutivos.
Los fiscales federales con sede en Manhattan también han buscado información sobre una cuestión distinta, la autonomía de conducción de los vehículos eléctricos de Tesla, sostuvo el Journal en su artículo del mes pasado.
El Journal informó de que la SEC y los fiscales federales de Washington y San Francisco estaban investigando si Tesla engañó a consumidores e inversores sobre el rendimiento de su sistema avanzado de asistencia a la conducción conocido como Autopilot. Las agencias no han anunciado ninguna medida de ejecución contra Tesla en relación con esas investigaciones. Tesla ha revelado en documentos de valores que ha recibido consultas del Departamento de Justicia sobre Autopilot.
Dentro de Tesla, el Proyecto 42 y su propósito eran secretos muy bien guardados.
Los abogados y miembros del consejo de Tesla examinaron el proyecto después de que los empleados se preocuparan por el uso que se daría a los millones de dólares en paneles de vidrio de gran formato que la empresa había encargado.
Zach Kirkhorn, que fue director financiero de Tesla antes de renunciar el mes pasado, fue uno de los que plantearon dudas internamente sobre el proyecto.