Después de estar más de una hora encerrado en el camarín con los que hasta anoche eran sus dirigidos, Eduardo Berizzo sorprendió a todos al anunciar, sin aceptar preguntas, su renuncia a la banca de la selección chilena luego del empate ante Paraguay.
“He manifestado mi deseo de dejar el cargo al presidente de la Federación. Los resultados no han sido los esperados y es digno reconocerlo. Quisiera agradecer a todos los que han trabajado conmigo”, partió diciendo el “Toto”.
“Creo que las chances de clasificar existen, están intactas, ojalá el clima se descomprima para que Chile pueda clasificar. Ha sido un honor dirigir a la selección chilena”, concluyó Eduardo Berizzo.
Así, Chile deberá jugar en su visita a Ecuador en Quito con un técnico interino. Habrá que ver cual decisión se toma en Quilín.
Por Ignacio Soto Bascuñán