Todos los años Apple presenta un nuevo sistema operativo con mejoras y un celular con tecnología y funciones sorprendentes. Pero cuando un usuario compra otro móvil, puede dejarle el anterior a sus familiares o amigos, y no saben que con el tiempo quedan obsoletos.
Con el lanzamiento de un nuevo sistema iOS, las exigencias mínimas para su funcionamiento aumentan, por lo que aquellos modelos de iPhone que no cumplen con ellas son dejados de lado y dejan de recibir actualizaciones de software, pero esto no quiere decir que vayan a dejar de funcionar por completo.
En el caso del iPhone X, que este año dejó de recibir la actualización de iOS 17, la pérdida de la capacidad para instalar nuevas versiones del software de Apple impacta únicamente en la posibilidad de que los usuarios puedan experimentar las funciones nuevas del sistema operativo como la aplicación Journal, nuevos Widgets, entre otras.
Sus características principales siguen operando con normallidad y, a no ser que haya cuidado mal, en los próximos años solo presentará inconvenientes en las transiciones entre aplicaciones, animaciones y reproducción de contenido de video de alta calidad.
En ese sentido, aunque se acepta que el iPhone X pasó a ser un celular desactualizado, sigue estando lejos de ser un dispositivo obsoleto pues en los próximos años seguirá recibiendo (al menos de manera esporádica) actualizaciones de seguridad.
Estas son mucho más fáciles de instalar para dispositivos viejos pues no requieren del cumplimiento de características mínimas del dispositivo. Al ser instaladas lo que Apple pretende es mantener seguros los datos de los usuarios y evitar que cibercriminales puedan aprovechar errores que se puedan encontrar en versiones antiguas de iOS.
Si se toma como ejemplo un dispositivo incluso más viejo como el iPhone 6 o incluso el iPhone 5 (en todas sus versiones), estos dispositivos sí pueden considerarse como obsoletos pues luego de 10 años finalmente Apple decidió dejar de darle soporte de seguridad a estos celulares.
Además, si luego de un periodo máximo de 6 años un iPhone ya empieza a presentar inconvenientes graves como un consumo acelerado de la energía de la batería, mal funcionamiento de aplicaciones e incluso pérdida de actualizaciones de plataformas de redes sociales como WhatsApp, X, entre otras. En un periodo aún mayor (10 años) se considera que el usuario podría considerar un cambio de dispositivo por uno en mejores condiciones.
Apple tiene dos términos para referirse a los dispositivos viejos: “antiguos” y “obsoletos”. La diferencia principal entre ambos se encuentra en el tiempo que Apple pasó sin distribuirlos. “Los productos se consideran antiguos cuando la empresa los ha dejado de distribuir para su venta hace más de cinco años pero menos de siete”, asegura su página web. Estos aún pueden tener acceso a algunas piezas de repuesto para reparaciones, pero no son muchas.
Quienes componen esta lista son:
- iPhone 4 (8 GB).
- iPhone 5 y 5S.
- iPhone 6, 6 Plus, 6s (32 GB) y 6s Plus (32 GB).
Por otro lado, los dispositivos considerados obsoletos son los que tienen “más de siete años desde que Apple dejó de distribuirlos para su venta”. En ese sentido, estos celulares ya no cuentan con piezas de repuesto para reparaciones y tampoco se pueden solicitar a pedido.
En esta lista se encuentran:
- iPhone.
- iPhone 3G (8 GB y 16 GB).
- iPhone 3GS (8 GB, 16 GB y 32 GB).
- iPhone 4 (8 GB, 16 GB y 32 GB).
- iPhone 4s, 4s (8 GB).
- iPhone 5c.
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