Tras días cargados de declaraciones cruzadas, finalmente este miércoles el fiscal nacional, Ángel Valencia, resolvió la solicitud presentada por la defensa del general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, para que inhabilite al fiscal regional Centro Norte, Xavier Armendáriz, en la causa donde se persiguen presuntas responsabilidades de altas autoridades en violaciones a los derechos humanos, arista que es conocida como “lesa humanidad”.
Y aunque desde la defensa del mandamás de la institución policial insistían en que habían “hechos concretos” que demostraban que el citado persecutor no reunía las condiciones de objetividad para seguir a cargo del caso, por su supuesta “odiosidad” hacia el general y la institución, Valencia desestimó esos argumentos.
Así, tras analizar los documentos aportados por el abogado de Yáñez, Jorge Martínez, y también los antecedentes solicitados a la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, el fiscal nacional rechazó inhabilitar al fiscal regional. Es decir, no halló en su actuar ninguna situación que lo haga perder objetividad al investigar al alto mando policial.
Eso sí, como se informó por parte del Ministerio Público, y argumentando que la carga laboral que pesa sobre los hombros de Armendáriz es bastante, Valencia sí determinó reasignar esa causa que es distinta a la que decidió formalizar el titular de la Centro Norte y que se caratula como “responsabilidad de mando” en el estallido social y que apunta a las máximas autoridades de Carabineros en el 18-O.
Desde ahora, entonces, la arista vinculada a Crímenes de Lesa Humanidad -donde se busca establecer si hubo o no una política sistemática para vulnerar los derechos de las personas- pasará a manos del fiscal regional de Antofagasta, Juan Castro Bekios. En esta causa está agendada una audiencia de sobreseimiento para el 19 de enero. Este medio pudo constatar que la resolución sostiene que se deberá seguir trabajando con el equipo de la fiscal adjunto Ximena Chong.
Esto no quita, de todas maneras, que el fiscal Xavier Armendáriz siga a la cabeza de la indagación donde se evalúan las responsabilidades del Alto Mando de Carabineros, y bajo la cual, de hecho, Ricardo Yáñez será formalizado el próximo 7 de mayo como autor de delito omisivo de apremios ilegítimos con resultado de lesiones graves y homicidio.
Por eso resulta relevante el hecho que Valencia declinara la inhabilidad del citado fiscal regional, puesto que a pesar de que se tratan de causas diferentes, ambas tienen relación con el actuar de Carabineros y, reconocer que tiene algún tipo de animadversión contra la institución o hacia el general director, habría implicado, en la práctica, tener que removerlo de ambas.
“El Fiscal Nacional determinó que los argumentos presentados por la defensa del General Yáñez no poseían la solidez necesaria para justificar la inhabilitación del fiscal Armendáriz, respecto de quien tiene la facultad de resolver su inhabilidad. Por lo tanto, el Fiscal Regional Metropolitana Centro Norte continuará al frente de la investigación del “Caso Alto Mando”, que incluye una audiencia de formalización contra el General Director de Carabineros, Ricardo Yáñez”, indicaron por medio de un comunicado desde la Fiscalía Nacional.
Además, respecto de la designación de Castro Bekios, se precisó: “Esta decisión se debe a la carga de trabajo significativa y la complejidad de manejar simultáneamente dos investigaciones penales de esta envergadura. La designación, fue realizada en virtud del artículo 19 de la Ley Orgánica del Ministerio Público”.
Los dardos contra Armendáriz
Como había expuesto la defensa de Yáñez, la solicitud de inhabilidad se fundaba en que “desde la época del ‘caso bombas I’ (el persecutor) ha manifestado una permanente odiosidad hacia la institución de Carabineros de Chile, la que se ha acrecentado después de los hechos del 18 de octubre de 2019″.
Citaban, en ese sentido, las palabras que esbozó el fiscal regional en consejo general del Ministerio Público de diciembre de 2019. “No podemos aceptar que una institución tenga un espíritu corporativo para encubrir delincuentes (…), acá hay una responsabilidad de mando, ha habido una forma de enfrentar los problemas de orden público que es francamente inaceptable”, dijo el abogado ese día.
Sin embargo, a juicio de Armendáriz esos dichos sólo tenían sentido en esa época. “No hay ningún fiscal del Ministerio Público que esté de acuerdo en que una institución no debe encubrir delincuentes. Lo que yo dije fue en un consejo general que fue hace más de cuatro años, y donde hubo diferentes intervenciones. Eso hay que situarlo en su contexto y en su momento (…) Fue en un clima, en un momento que no es posible recrear”, complementó.
De acuerdo con lo señalado por el abogado, “extraer una frase que se dio en ese contexto, no tiene sentido”.
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