Como una emergencia de salud pública de importancia internacional. Así declaró recientemente la Organización Mundial de la Salud (OMS) al mpox.
Se trata de la enfermedad altamente infecciosa que antes se conocía como viruela del mono y que fue rebautizada con el fin de evitar asociaciones erróneas o estigmas.
Es, además, la segunda vez en dos años que el organismo decide activar el nivel de alerta más grande indicado en el Reglamento Sanitario Internacional, ante la presencia de esta afección.
La decisión de la OMS se da a partir de un brote originado en la República Democrática del Congo, donde se presentó una nueva cepa que aparentemente sería más letal y se propaga con mayor rapidez.
A pesar de que la gran mayoría de las infecciones se concentran actualmente en ese país, en los últimos meses también se han extendido a otras zonas de África como Burundi, Nigeria y Camerún. Solo en lo que va del 2024 se han registrado casi 20.000 casos y más de 500 muertes en el continente producto de la enfermedad.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, argumentó que el panorama en la República Democrática del Congo es “muy preocupante” y que se requiere “una respuesta internacional coordinada para detener estos brotes”, y de esa manera, evitar que el número de muertes aumente.
Mientras que el presidente del Comité de Emergencias de la OMS, Dimie Ogoina, aseguró que el recrudecimiento del brote “constituye una emergencia no solo para África, sino que para el planeta”.
Desde la visión Ogoina, en el pasado el mpox “no recibió la atención que se merecía en África”, que fue donde se registró el primer caso en humanos. “Más tarde provocó un brote mundial en 2022. Es hora de actuar con decisión para evitar que la historia se repita”, agregó.
La medida de “emergencia de salud pública de interés internacional” no establece que los países tengan obligaciones, sino que busca promover acciones coordinadas entre los distintos estados para enfrentar la enfermedad.
Qué es el mpox
Antes conocida como viruela del mono o viruela sísmica, el mpox es una enfermedad infecciosa que es causada por el virus del mpox. Es considerada una zoonosis, es decir, se puede transmitir de animales a personas. Aunque es parte del mismo grupo de la viruela, se estima que es menos dañina.
De acuerdo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas inglés) la afección fue por primera descubierta en 1958, luego de que ocurrieran dos brotes de una enfermedad similar a la viruela en colonias de monos criados para una investigación.
Si bien históricamente se le ha llamado “viruela del mono”, el origen exacto de la enfermedad es aún desconocido para la ciencia.
En la década de 1970, se detectó el primer caso humano en la República Democrática del Congo. Desde entonces surgieron casos en África Central y Occidental.
Sin embargo, en 2022 todo cambió. Ese año se registró el mayor brote de mpox en toda la historia, dejando alrededor 100.000 casos de infecciones y más de 200 muertes en regiones fuera del continente africano.
Cuáles son los síntomas del mpox
Esta enfermedad zoonótica se manifiesta en diferentes síntomas dependiendo de cada caso.
Una de las señales más claras es que los pacientes presentan erupciones cutáneas en las manos, pies, cara, boca, pecho o incluso en las cercanías de los genitales, detallan los CDC. Las lesiones suelen causar picazón y dolor, aunque después se transforman en costras que se caen.
Otras señales recurrentes de la enfermedad son fiebre, escalofríos, dolores de cabeza, dolores musculares, agotamiento, ganglios linfáticos inflamados y síntomas respiratorios, como tos, congestión nasal o dolor de garganta.
Es probable que los pacientes que estuvieron expuestos al virus que causa el mpox no presenten síntomas evidentes de inmediato. Esto se debe a que el periodo de incubación puede extenderse desde 3 a 17 días, y recién después de eso, las señales se manifestarán.
De qué forma se contagia
La enfermedad se transmite mediante cualquier tipo de contacto con alguien que esté infectado.
Lo anterior se traduce en que el virus puede ingresar al cuerpo si se ha estado expuesto al sarpullido o costras originadas por mpox. También mediante las interacciones prolongadas cara a cara (como hablar), secreciones de las vías respiratorias superiores y fluidos corporales, lo que incluye el contacto sexual.
De hecho, las autoridades sanitarias han indicado que la mayoría de los casos del brote de 2022 fueron por contacto sexual.
Según detallan los CDC, las embarazadas que se contagiaron de la enfermedad también podrían transmitir el virus a su feto, así como al recién nacido durante o tras el parto.
Tocar objetos que estén contaminados es otra forma de contagio. Entre ellos se incluyen las prendas de vestir, toallas, ropa de cama y juguetes sexuales.
De igual forma, los animales son capaces de transmitir el virus. Esto puede ocurrir mediante el contacto con animales infectados, sus fluidos, desechos y al ser arañado o mordido por ellos. La caza, captura o transporte de animales salvajes donde el mpox es endémico es otra posible vía de contagio.
Cabe destacar que, aunque la enfermedad no se manifiesta de manera inmediata, los pacientes infectados son capaces de transmitir el virus a quienes los rodean de igual forma. Esto puede ocurrir desde 1 a 4 días antes de presentar síntomas.
Algunos grupos, además, tienen más posibilidades de que el mpox se agrave. Embarazadas, recién nacidos, niños, personas con inmunodeficiencia y trabajadores de salud, son algunos de los grupos de riesgo.
Cuál es el tratamiento
De acuerdo a los organismos sanitarios, no existe un tratamiento determinado para el mpox.
Lo anterior se debe a que los métodos para enfrentar la afección varían si es que es un caso normal o hay mayor riesgo de que se agrave. En muchos casos los pacientes infectados terminan recuperándose como máximo 4 semanas después, sin mayores complicaciones.
En los pacientes con inmunodeficiencia, es probable que necesiten medicamentos específicos para tratar la enfermedad.
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