El país más barato para vivir en Sudamérica es Paraguay, que según Numbeo, la mayor base de datos sobre países y ciudades a nivel mundial, tiene un índice de costo de vida de 27,59, considerablemente más bajo en comparación con el índice de 100 de Nueva York. Este indicador toma en cuenta aspectos como el costo de alimentos, alquiler, servicios básicos y otros gastos diarios.
Uno de los motivos por los que Paraguay se posiciona como el país más económico de Sudamérica es su accesible mercado inmobiliario.
En ciudades como Asunción y Ciudad del Este, alquilar un departamento en el centro cuesta entre 300 y 400 dólares mensuales. Quienes optan por vivir en las afueras pueden ver una reducción de hasta un 40% en estos costos, con alquileres que varían entre 180 y 240 dólares.
Para quienes buscan opciones más pequeñas, los monoambientes son una alternativa económica, con alquileres mensuales que rondan entre 250 y 300 dólares. Esta variedad de precios permite que tanto jóvenes profesionales como familias encuentren opciones accesibles.
El costo de los alimentos en Paraguay
Otro aspecto que hace de Paraguay un lugar barato para vivir es el precio de los alimentos. Una familia promedio gasta entre 150 y 200 dólares mensuales en el supermercado. Además, las ferias permanentes, apoyadas por el gobierno, ofrecen productos frescos a precios aún más bajos.
Salir a comer fuera también es accesible en Paraguay. Una cena en un restaurante de lujo en Asunción cuesta entre 12 y 25 dólares por persona, mientras que los restaurantes más económicos ofrecen platos principales por entre 3 y 10 dólares.
Otros destinos económicos en Latinoamérica
Paraguay no es el único país con un bajo costo de vida en Sudamérica. Argentina y Bolivia le siguen de cerca, con índices de 27,80 y 28,27 respectivamente. Aunque estos países también ofrecen opciones económicas, Paraguay se destaca por su combinación de accesibilidad y calidad de vida
Además de Paraguay, otros países de Latinoamérica como Nicaragua, Perú y Colombia también son reconocidos por su bajo costo de vida, con precios hasta un 70% menores que en Nueva York. Estos destinos siguen siendo populares para quienes desean reducir sus gastos sin comprometer su calidad de vida.
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