El dólar cerró sus operaciones más líquidas con un tímido avance en el mercado cambiario local, ubicándose sobre los $975. En concreto, el billete verde concluyó con un ascenso de $0,5 en puntas de $976,7 vendedor y $976,4 comprador.

Según datos proporcionados por Felipe Sepúlveda, analista jefe de Admirals, el comportamiento del tipo de cambio «reflejó una jornada marcada por movimientos mixtos en los mercados internacionales, influenciados por factores clave».

Uno de los principales elementos que afectaron al mercado local fue el retroceso del cobre, el principal producto de exportación del país, que cerró con una caída del 0,92%, alcanzando los US$4,21 por libra.

«Este retroceso contrasta con el optimismo temprano generado por el inicio de la Conferencia Económica Central en China, donde los líderes están delineando objetivos y estímulos económicos para 2025», detalló Sepúlveda, quien además atribuyó la baja a «una mayor fortaleza del dólar a nivel global».

En el escenario internacional, el índice dólar registró un avance del 0,2% tras cuatro sesiones consecutivas al alza.

«Este movimiento ocurrió luego de que el Banco Central Europeo (BCE) recortara sus tasas en 25 puntos base, lo que generó incertidumbre sobre la economía de la Eurozona y fortaleció la demanda del dólar como activo refugio», agregó Sepúlveda.

Por su parte, Ricardo Bustamante, subgerente de estudios de Capitaria, destacó que «la cotización del dólar registra leves avances después de una apertura levemente bajista, viéndose apoyado por fundamentos externos del tipo de cambio».

Según el analista, «el dólar ha mostrado alzas generalizadas en la sesión, viéndose reflejado en el Dollar Index, después de conocerse un dato de inflación al productor mayor al esperado en Estados Unidos, dando fortaleza a la moneda norteamericana».

En cuanto a las perspectivas para los próximos días, Bustamante adelantó que «mañana no se conocerán grandes datos que impacten al tipo de cambio, pero durante la próxima semana se revelarán cifras económicas claves en Estados Unidos, además de las decisiones de tasas del Banco Central de Chile y de la Reserva Federal de Estados Unidos que podrían generar mayor volatilidad».

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