El dólar cerró sus operaciones más líquidas con movimientos mínimos al alza que lo ubicaron en los $990.
En concreto, el billete verde subió $0,8 y concluyó en puntas de $990,8 vendedor y $990,5 comprador.
Según detalló Felipe Sepúlveda, analista jefe de Admirals, este movimiento se produjo pese al avance del precio del cobre, que aumentó un 0,79% hasta alcanzar los US$4,13 por libra.
«El impacto positivo del cobre en el peso chileno no fue suficiente para contrarrestar la fortaleza global del dólar», explicó el experto.
El alza del metal rojo fue impulsada por expectativas de mayor demanda internacional, particularmente desde China. Sin embargo, el Dólar Index, indicador que mide el desempeño de la divisa estadounidense frente a una canasta de monedas principales, mostró un leve avance del 0,08%.
«Este movimiento refleja una ligera inclinación hacia la fortaleza del dólar en un contexto de bajo volumen de negociación en los mercados globales, una situación habitual tras las festividades navideñas», señaló Sepúlveda.
A nivel local, el limitado volumen de transacciones también jugó un rol importante en las fluctuaciones.
«El mercado local se vio afectado por un nivel de transacciones reducido, lo que tiende a amplificar las fluctuaciones en el tipo de cambio», comentó el analista, agregando que la falta de noticias económicas significativas a nivel internacional ha mantenido a los inversionistas a la espera de datos más claros, como cifras económicas en Estados Unidos o decisiones de política monetaria.
Por su parte, Felipe Tiznado, analista de mercados de XTB Latam, destacó que «el dólar se mantiene estable en torno a los $990 por unidad, consolidándose en este nivel durante toda la semana».
Según Tiznado, esta estabilidad refleja las expectativas de que la Reserva Federal (Fed) no hará cambios en su postura sobre los recortes de tasas de interés tras su reciente decisión del 18 de diciembre.
El contexto global también ha influido en el comportamiento del tipo de cambio.
«A nivel global, el dólar internacional continúa fortaleciéndose, pero a un ritmo más moderado en comparación con la semana pasada», indicó Tiznado.
Además, el precio del cobre mostró cierta volatilidad. Aunque su cierre fue positivo, el analista advirtió que el mercado enfrenta desafíos derivados de la crisis inmobiliaria en China, donde los precios de los alquileres de viviendas alcanzaron su nivel más bajo en cuatro años.
Respecto a las perspectivas futuras, Tiznado señaló que «las proyecciones apuntan a una ligera corrección hacia los $988 por dólar, especialmente si las presiones sobre el dólar internacional ceden. Sin embargo, si no se presentan cambios significativos en los datos inflacionarios de EE.UU., es probable que veamos una consolidación del tipo de cambio en torno a los $990».
Ambos analistas coincidieron en que el cierre en $990 refleja una mezcla de factores locales e internacionales que mantienen al mercado en un estado de cautela.
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