El ex ministro de Hacienda, Ignacio Briones se sumó a las críticas y calificó la decisión del Comité de Ministros de rechazar, nuevamente, el proyecto minero-portuario Dominga como «un desastre» y que la señal institucional «es como el forro».
La instancia resolvió ayer negar por tercera vez el proyecto, tras una sesión extraordinaria presidida por el Ministerio del Medio Ambiente. La instancia estuvo marcada por la participación de funcionarios subrogantes, ya que los ministros titulares se inhabilitaron dado que ya se habían pronunciado respecto en 2023.
En entrevista con Radio Infinita, el presidente de Horizontal manifestó que esta decisión refleja una profunda falencia institucional en el país.
«La señal institucional es como el forro. Ya que tengamos un comité de ‘not ministros’ que digan ‘not Dominga’ es como una rareza, ¿no? Son todos funcionarios que uno se pregunta, ¿cuál es su independencia? Son todos mandatados por sus superiores», reprochó.
Para el economista, la discusión sobre Dominga es un ejemplo de un problema mayor que afecta la inversión en Chile. «Es la consecución de una larga saga de cuestiones que creo que le hacen muy mal a la inversión en Chile. Y develan carencia institucional que es el tema de fondo. Como país no hemos sido capaces de arreglarla, esa es la verdad», subrayó.
Briones también cuestionó la demora en los procesos de evaluación para megaproyectos, los cuales, asegura, deberían resolverse de manera más expedita y técnica.
«Uno debiera tener un proceso lo más ciego, lo más institucional, lo más técnico posible. Donde para un megaproyecto te digan tempranamente ‘sí o no’. No puede ser que un proyecto demore 10 años en dimes y diretes. Es una falta de seriedad de país gigantesca», agregó.
El rechazo a Dominga, según Briones, responde más a compromisos políticos que a criterios técnicos.
«Yo creo que hay un fuerte compromiso previo de no a Dominga. Estuvo en la campaña presidencial del Presidente (Boric). Es como una bandera de lucha. De alguna manera, la opinión está sesgada o predefinida exante y políticamente para ellos es muy costoso tener que decir que no a Dominga, se ha transformado en un caso emblemático», explicó.
Asimismo, cuestionó el impacto de la influencia política en decisiones como esta. «Cuando tú te casaste con un no, antes de empezar una carrera presidencial, porque esa es la agenda de quienes hoy están en el Gobierno, es muy difícil desdecirse sí es una bandera de campaña», reiteró.
El exministro finalizó con una reflexión institucional y proyectando una imagen crítica de la situación con el siguiente ejemplo: «Si uno se pone en un platillo volador, uno se olvida de que esto es Chile, mira de afuera como un espectador imparcial y tú observas este proyecto (…), si uno tuviera que ponerle un nombre a ese país, ese país se llama ‘poco serio'».
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