Nuestro país tiene del año que le pidan, es una frase coloquial pero que refleja que la raza ha ido mutando como la metamorfosis de Kafka, donde definitivamente hemos llegado tan bajo, qué, para broche de oro, ya tenemos más de 100 candidatos a la presidencia, porque la vara del actual mandatario lo permite.
Hemos visto que se ha aprobado la reforma previsional en este gobierno de extrema izquierda, muy distinta a lo que querían y que estaba planteado en la convención o mejor dicho del mamarracho, que querían imponernos, donde la palabra expropiación o nacionalización de los ahorros previsionales era una de las materias importantes que deseaban implantar, y donde la mayoría de las personas le dieron un portazo a esa idea tan descabellada.
Ver celebrar y bailar a una ministra del trabajo, comunista, que junto al gobierno cuyo apoyo fluctúa dentro de un 30%, y que jamás lo han superado, por haber aprobado una reforma previsional, donde le están quitando ahorros a los trabajadores, que tendrán obligatoriamente que prestarle su esfuerzo, su dinero al gobierno, al Estado, sin ninguna garantía que éste será devuelto, es como vivir en la época del Emperador Vespasiano, que se destacó por cobrar tributos a su pueblo y estos jamás se utilizaron para beneficiarlos.
Celebrar con música, con algunos pocos adherentes, con baile y con lo peor de todo, utilizando a esa derechita cobarde y vendida, que les creyó el cuento de la necesidad del “pueulo”, de ser “solidario”, para recibir $ 25.000 y la PGU ya no será aumentado a $ 250.000 para los adultos de 65 años, como lo había dicho Boric en campaña, sino a recibir en 3 años más, es decir, sólo con el IPC se llega a esa cifra, es otra mentira más. Con esos amigos para aprobar el despojo previsional, mejor tener enemigos que conoces sus falencias y sabrás como actuar.
Esa “derecha cobarde” buenita, que se conmueve con el verso comunista de quienes no creen en el emprendimiento, no creen en la libertad de elegir, no creen en las inversiones, les otorgan sus votos, habiendo prometido respetar la voluntad del 62%, que dijeron que el 6% adicional, de cargo del empleador, iría íntegramente a la cuenta individual de cotización obligatoria de cada trabajador, han traicionado a sus votantes y reciben el desprecio de sus “socios del saqueo previsional”, que instalan a candidata presidencial con ese apoyo traidor cuyo costo tendrá consecuencias insospechadas.
Margot Guerrero Bruner
Asesora Previsional
Corredor de Seguros
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