En un giro que tensiona las negociaciones de la derecha chilena, Johannes Kaiser, líder del Partido Nacional Libertario (PNL), cerró este martes cualquier especulación sobre su retiro de la carrera presidencial. Con un mensaje contundente en redes sociales —“NO me voy a bajar, ¿lo entienden o no?”—, el diputado desmintió rumores de un posible acuerdo con el Partido Republicano para optar por una candidatura senatorial en La Araucanía. Su decisión, sin embargo, expone fisuras estratégicas en un sector que busca unificar fuerzas contra Evelyn Matthei, candidata de Chile Vamos.
¿Por qué importa? La pulseada entre Kaiser y el Partido Republicano (PR) —del que fue miembro hasta 2022— refleja un dilema clave para la oposición: fragmentar votos con múltiples candidatos o consolidar una figura única que enfrente a Matthei. Según encuestas recientes, una elección con tres nombres de derecha podría beneficiar a la exministra, quien lidera las preferencias en ese espectro.
Claves del conflicto:
- Negociación en marcha: Desde mayo, el PR, el PNL y el Partido Social Cristiano (PSC) negocian un pacto parlamentario para agosto, buscando optimizar recursos y evitar competencias internas. Pero la discusión presidencial sigue abierta: mientras el PR insiste en que Kaiser desista para fortalecer una candidatura única, el libertario exige primarias o ir directamente a primera vuelta.
- Cálculo electoral: Analistas consultados por este medio coinciden en que el PR pretende evitar que Kaiser consuma recursos en su campaña presidencial, lo que debilitaría el apoyo a sus candidatos legislativos.
- Efecto Matthei: La posible dispersión de votos en la derecha no tradicional —donde el PR tiene ventaja— podría consolidar a Chile Vamos como la única fuerza capaz de competir en segunda vuelta.
La jugada de Kaiser: ¿principios o postureo?
El diputado ha usado un lenguaje provocador para marcar posición. En redes, retó a sus críticos con un “apuesto doble contra sencillo a que no me bajo” y cuestionó la negativa del PR a realizar primarias. Su estrategia, sin embargo, tiene riesgos: si no logra superar el 3% en encuestas antes de octubre —umbral para validar su candidatura—, quedaría fuera automáticamente, un escenario que sus rivales ya anticipan.
¿Qué viene?
- Agosto como fecha crítica: Si se concreta el pacto parlamentario, Kaiser deberá definir si mantiene su campaña sin el respaldo logístico del PR. Fuentes cercanas a las negociaciones advierten que, sin acuerdos, el PNL podría quedar aislado.
- El factor Kast: José Antonio Kast, líder del PR, mantiene silencio público, pero voceros de su colectividad insisten en que “la unidad es prioridad”. No descartan, sin embargo, presentar su propia candidatura presidencial si Kaiser persiste.
Análisis final: La resistencia de Kaiser no es solo una pulseada personal: revela tensiones ideológicas dentro de una derecha que intenta reposicionarse tras el rechazo a la Constitución de 2022. Mientras el PR apela a un discurso de orden y estabilidad, el PNL radicaliza su retórica libertaria. En este tablero, Matthei observa —y capitaliza— cada grieta.
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