El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su optimismo que su país y China llegarán a un acuerdo sobre los aranceles, basándose en su buena relación con el mandatario chino Xi Jinping.
Trump, en una reunión con su gabinete ministerial en Washington, manifestó su confianza en que llegará a un pacto con Beijing que sea “muy beneficioso para ambos países”.
Tras haber decidido recrudecer las tarifas impuestas sobre las importaciones chinas -que ahora ascenderán al 145 %- Trump señaló: “Vamos a ver qué pasa con China. Nos encantaría llegar a un acuerdo”.
Pero enseguida en un tono menos amistoso expresó que “realmente se han aprovechado de nuestro país durante mucho tiempo”, culpando a los expresidentes por lo que él llamó una estafa de China a Estados Unidos.
Subrayó nuevamente que Beijing ha “engañado” desde hace décadas a la primera economía mundial.
“Nos han estafado más que nadie”, detalló el mandatario, quien afirmó que “lo único que estamos haciendo es poner las cosas en orden”.
Añadió que “estamos reestructurando la mesa y estoy seguro de que podremos llevarnos muy bien. Siento un gran respeto por el presidente Xi. Ha sido, en el fondo, amigo mío durante mucho tiempo, y creo que terminaremos logrando algo muy beneficioso para ambos países”.
Trump restó importancia a la decisión de China de reducir el número de películas estadounidenses que se exhiben en el país, sugiriendo que es una débil represalia contra sus aranceles. “Creo que he oído cosas peores”, mientras estallaban risas en su gabinete.
El encuentro con su gabinete tuvo lugar un día después de que Trump decretara una tregua parcial de 90 días en los aranceles anunciados el pasado 2 de abril para todos sus socios comerciales, con la excepción de China.
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