A las 00:30 horas del jueves, la actriz Lorene Prieto ingresó a la 33ª Comisaría de Ñuñoa para denunciar la desaparición de su hijo Santiago Ramírez Prieto (37 años). Diez horas después, tras activar protocolos de búsqueda urgente, personal de la SIP se dirigió a una residencia en calle Presidente Errázuriz –propiedad de la familia Prieto–, siguiendo indicios reportados por la intérprete.
El descubrimiento: escalofrío en dos actos
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Primer piso: evidencia ominosa
Al ingresar al inmueble, los funcionarios hallaron dos manos humanas en la planta baja, un descubrimiento que elevó la alerta a nivel de crisis. -
Segundo piso: escena traumática
En la planta superior, ubicaron a Santiago Ramírez consciente pero en shock, con:-
Amputación total de ambas extremidades superiores.
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Múltiples lesiones corporales no especificadas.
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Cuadro de hemorragia masiva que requirió traslado de emergencia al Hospital del Salvador, donde logró estabilizarse.
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Claves analíticas del caso
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Paradoja investigativa: Aunque se descarta preliminarmente la participación de terceros, las lesiones (especialmente las amputaciones) plantean interrogantes técnicas: ¿Es viable la autoinfligencia en un contexto de shock? Expertos forenses consultados por este medio señalan que tales heridas suelen requerir instrumentos especializados y tiempo, lo que tensiona la hipótesis inicial.
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Dinámica familiar bajo lupa: El escenario del hallazgo –una vivienda de propiedad familiar en Ñuñoa– añade capas de complejidad. ¿Existían conflictos previos reportados? El SIIMP y Fiscalía ya revisan antecedentes psicosociales y registros de llamadas.
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Gestiones institucionales: La secuencia denuncia nocturna → despliegue diurno SIP → hallazgo escalonado sugiere que Carabineros priorizó el protocolo, pero también abre preguntas sobre tiempos de respuesta en casos de alto riesgo.
Estado actual: lo que se sabe y lo que flota en incógnitas
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Condición médica: Santiago permanece bajo observación en el Hospital del Salvador. Su capacidad para declarar dependerá de su evolución neurológica.
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Línea investigativa: La PDI asumió el caso para determinar si hubo autolesión extrema, negligencia o indicios encubiertos de terceros. Se analizan cámaras de seguridad perimetrales.
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Reacción pública: Lorene Prieto no ha emitido declaraciones. Su perfil como figura televisiva añade presión mediática al proceso.
- Si bien, por el momento, se descartaría la intervención de terceras personas, el impactante caso está en pleno proceso de investigación.
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