Un equipo de físicos de la Universidad de la Ciudad de Nueva York logró demostrar experimentalmente la existencia de los denominados “espejos del tiempo”, un fenómeno teórico en el que las ondas electromagnéticas pueden revertir su flujo temporal. El hallazgo, publicado recientemente en Nature Physics, abre nuevas posibilidades para el desarrollo de tecnologías en comunicaciones e informática.

Cuando una persona se mira en un espejo convencional, observa una imagen reflejada producto de la reflexión espacial de las ondas de luz. En contraste, el fenómeno conocido como reflexión temporal ocurre cuando las propiedades del medio a través del cual se propaga una onda cambian abruptamente en todo el espacio. Esto provoca que una parte de la onda retroceda en el tiempo y cambie su frecuencia, como si, en lugar de ver el rostro reflejado, se viera la espalda.

Aunque la reflexión temporal ha sido estudiada teóricamente por décadas, su observación directa en ondas electromagnéticas no había sido posible hasta ahora, principalmente debido a las dificultades técnicas para alterar con suficiente rapidez las propiedades ópticas de los materiales.

Un experimento sin precedentes

Para llevar a cabo el experimento, los científicos utilizaron un metamaterial: una tira metálica de 6 metros de largo, diseñada para manipular ondas electromagnéticas de manera poco convencional. Esta tira fue montada sobre una placa y equipada con una red de interruptores electrónicos conectados a condensadores.

Los investigadores activaron simultáneamente todos los interruptores, duplicando de forma repentina la impedancia de la tira metálica. Este cambio abrupto en las propiedades del medio provocó una reflexión temporal, en la cual las señales electromagnéticas medidas incluían una copia invertida en el tiempo de las señales originales.

Aplicaciones potenciales

Según informó Earth.com, este descubrimiento podría revolucionar el diseño de sistemas de comunicación, mejorando la transmisión de datos en diferentes frecuencias del espectro electromagnético. También se vislumbran aplicaciones en sensores, tecnologías de imagen y el desarrollo de computadoras ópticas de bajo consumo energético.

La confirmación de los espejos del tiempo representa un hito para la física moderna y plantea nuevas preguntas sobre el comportamiento de las ondas y la manipulación del tiempo a escala cuántica y electromagnética.

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