El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, instruyó la apertura de una investigación oficial para esclarecer un supuesto encubrimiento relacionado con el estado de salud cognitiva del expresidente Joe Biden durante su mandato.
A través de un memorándum difundido por la Casa Blanca, Trump calificó la situación como “uno de los más peligrosos y preocupantes escándalos de la historia de Estados Unidos” y ordenó la conformación de un equipo interinstitucional para indagar a fondo las circunstancias que rodearon el ejercicio del poder durante los años finales de la administración Biden.
El documento establece que el equipo investigador estará compuesto por el Consejero del Presidente, el Fiscal General y los titulares de las agencias y departamentos ejecutivos pertinentes. Su mandato será determinar si existió una conspiración para ocultar el verdadero estado de salud mental del exmandatario, así como evaluar si se tomaron decisiones inconstitucionales durante ese período.
Sospechas y acusaciones
La decisión del actual presidente responde a reiteradas acusaciones provenientes de sectores del Partido Republicano y medios conservadores, que han cuestionado la capacidad de Biden para ejercer el cargo. Entre los elementos más citados por los críticos se encuentran la escasa presencia pública del exmandatario, su limitada disposición a conceder entrevistas y supuestas señales de deterioro cognitivo.
Algunos simpatizantes de Trump van más allá y acusan al círculo cercano de Biden de orquestar un encubrimiento sistemático. Incluso sostienen que se utilizó un dispositivo mecánico para replicar su firma en documentos oficiales, lo que —según estos sectores— habría permitido continuar con la administración cotidiana del país sin que el entonces presidente ejerciera realmente el poder.
Alcance de la investigación
La orden presidencial no solo contempla la revisión de evaluaciones médicas, sino también el análisis de decisiones de alto nivel tomadas durante la presidencia de Biden. El memorándum hace especial hincapié en la “ejecución de numerosas acciones ejecutivas” que habrían sido validadas mediante la supuesta firma automatizada, y ordena esclarecer quién autorizó ese mecanismo y con qué propósito se utilizó.
Trump enfatizó que la investigación debe buscar responsables dentro del equipo de asesores y funcionarios que, de confirmarse las acusaciones, habrían engañado deliberadamente a la opinión pública.
Contexto político
Joe Biden, de 81 años al momento de su retiro de la contienda electoral, decidió no postularse a un segundo mandato luego de un bajo desempeño en el debate presidencial contra Donald Trump. Este episodio avivó los cuestionamientos sobre su salud física y mental, generando un nuevo ciclo de escrutinio sobre su capacidad para liderar el país.
Con la orden emitida, Trump traslada el debate desde el plano político y mediático hacia la esfera institucional, abriendo una nueva etapa de investigación federal que podría tener consecuencias tanto jurídicas como políticas.
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