La tensión entre Irán e Israel continúa escalando. Este lunes, los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) anunciaron una nueva oleada de ataques con misiles contra objetivos israelíes, que calificaron como “más poderosa y devastadora que antes”. La ofensiva se enmarca en el contexto del actual conflicto abierto entre ambos países, que ha generado preocupación internacional por su potencial desestabilizador en Medio Oriente y otras regiones.
En un comunicado difundido por medios iraníes, el cuerpo militar aseguró que los sistemas de defensa israelíes fueron desbaratados durante la operación. Según los CGRI, las defensas multicapa del país hebreo habrían sido “atacadas entre sí”, lo que demostraría —según Irán— un fallo estratégico y técnico de la infraestructura militar israelí.
- “Quienes apoyan a este régimen criminal [Israel] deben saber que las operaciones efectivas, selectivas y cada vez más devastadoras contra sus objetivos vitales continuarán hasta su completa destrucción”, advirtió el CGRI.
Además, los militares iraníes señalaron que, pese al respaldo militar y tecnológico de Estados Unidos y otras potencias occidentales hacia Israel, sus misiles lograron impactar de forma exitosa en los objetivos designados en “los territorios ocupados”.
Condenas internacionales contra Israel
El ataque iraní ocurre tras una serie de ofensivas de Israel contra infraestructura nuclear iraní, que han sido calificadas como “no provocadas” por parte de Rusia. La Cancillería del Kremlin condenó duramente la acción israelí, mientras que el presidente Vladímir Putin ofreció mediar entre ambas naciones para evitar una mayor escalada.
En esa misma línea se manifestaron otros países como China, Turquía, Egipto, Arabia Saudita y Pakistán. Desde América Latina, también se sumaron voces críticas. Gobiernos como los de Brasil, Venezuela, Cuba y Nicaragua expresaron su rechazo a las recientes acciones de Tel Aviv.
Alerta por una escalada sin precedentes
El intercambio de ataques entre Israel e Irán ha sido calificado por analistas internacionales como el punto más álgido en décadas de hostilidades entre ambas naciones. La comunidad internacional observa con inquietud el aumento de los enfrentamientos directos, especialmente por el riesgo de un conflicto regional de mayor escala y el impacto en la estabilidad global.
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