Las recientes precipitaciones registradas en gran parte del país han dejado más de 300 milímetros (mm) de agua caída entre las regiones de Coquimbo y Los Lagos, producto del último sistema frontal que afectó a Chile en los últimos días.

Según datos entregados por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), la Región Metropolitana presentó un superávit del 14% en agua caída, destacando dentro del panorama nacional. Sin embargo, otras zonas del país mantienen un déficit de precipitaciones, pese a las intensas lluvias recientes.

Balance regional: cifras del agua caída

El Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) detalló que hasta la noche del lunes 16 de junio se habían registrado:

  • Coquimbo: 23,9 mm

  • Valparaíso: 76,8 mm

  • Región Metropolitana: 43,2 mm

  • O’Higgins: 39,3 mm

  • Maule: 62 mm

  • Ñuble: 69,4 mm

  • Biobío: 16,4 mm

  • La Araucanía: 2,6 mm

  • Los Ríos: 10,8 mm

  • Los Lagos: 19,4 mm

Cabe destacar que en el sur del país ha caído más nieve que lluvia, acompañado de ráfagas de viento que han alcanzado los 100 kilómetros por hora, lo que ha generado condiciones meteorológicas extremas.

Déficit hídrico persiste en varias regiones

A pesar del importante volumen de agua caída, el panorama hídrico sigue siendo crítico en gran parte del país. Según la DMC, las siguientes regiones presentan déficit respecto al promedio esperado para la fecha:

  • Coquimbo: -56%

  • Valparaíso: -7,1%

  • Maule: -4%

  • Ñuble: -24,7%

  • Biobío: -8,5%

  • La Araucanía: -10,1%

  • Los Ríos: +16,6% (superávit)

  • Los Lagos: +11,1% (superávit)

Temperaturas mínimas: capital registra casi -1 °C

La DMC también informó sobre las bajas temperaturas que se han registrado junto al sistema frontal. En la Región Metropolitana, la mínima del año se alcanzó la madrugada del 13 de junio, cuando los termómetros marcaron apenas 0,6 °C. En la estación de Pudahuel, el frío fue aún más intenso, con una temperatura de -0,7 °C.

Estas condiciones climáticas, entre lluvias, nieve y heladas, seguirán siendo monitoreadas por las autoridades para prevenir emergencias y actualizar los pronósticos ante nuevos sistemas frontales.

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