La taquilla estadounidense experimentó un repunte significativo con el estreno de Superman, la nueva apuesta de DC Studios bajo la dirección de James Gunn y distribuida por Warner Bros. La película recaudó 56 millones de dólares en su primer día, incluyendo 22,5 millones provenientes de funciones de preestreno. De acuerdo con Deadline, las proyecciones para el primer fin de semana se situaron entre 115 y 120 millones de dólares, superando las expectativas iniciales de la industria.

Este desempeño adquiere mayor relevancia si se considera el contexto de fatiga en el género de superhéroes. Lejos de evidenciar agotamiento, los resultados de Superman reflejan una renovada atracción por las franquicias clásicas, combinada con una ejecución eficaz en estrategia de distribución y marketing. Con un presupuesto de producción estimado en 225 millones de dólares (sin contar los gastos de promoción), la película logró el segundo mejor arranque para una cinta dirigida por Gunn en EE. UU., solo por detrás de Guardianes de la Galaxia Vol. 2 (146,5 millones).

El análisis de comportamiento del consumidor revela datos estratégicamente valiosos: el 49% del público adquirió sus entradas el mismo día del estreno, una tendencia consistente con otros títulos de alto perfil, que subraya la importancia de la visibilidad en tiempo real y la reacción inmediata del público. Además, el 42% de los ingresos provino de funciones premium (PLF e IMAX), lo que sugiere una preferencia clara por experiencias cinematográficas diferenciadas. Cines emblemáticos como el Teatro Chino Mann reportaron funciones agotadas, según la misma fuente.

En cuanto a la recepción del público, los indicadores son sólidos. CinemaScore otorgó una calificación A-, con un 74% de intención de recomendación, mientras que la puntuación de audiencia en Rotten Tomatoes alcanzó un notable 94%. Estos niveles de satisfacción fortalecen la proyección comercial de la cinta en las semanas siguientes.

Con ingresos de entre 115 y 120 millones de dólares en su primer fin de semana —incluyendo preestrenos—, Superman no solo lidera la taquilla del verano, sino que también redefine las perspectivas del mercado respecto al atractivo de las franquicias tradicionales en un ecosistema competitivo.