“El tiempo pasa… nos vamos poniendo viejos” , así empieza la canción, donde un día nos vimos azotados por la barbarie de unos cuantos inadaptados que por sólo $ 30,00 pesos, destruyeron la vida de muchos y a otros nos condenaron a cerrar oficina, negocios familiares, y pequeños emprendimientos, con el beneplácito de partidos políticos y otros que sólo pretendían destruir nuestra democracia.
Cuando nos sentíamos orgullosos de nuestro país, porque habíamos aprendido que la democracia, a pesar que nunca es tan perfecta, debíamos cuidarla entre todos, por la experiencia pasada, unos jóvenes rebeldes, fueron utilizados por grupos que hasta hoy se desconocen, se atrevieron a destruir, quemar, atacar como hienas hambrientas de poder, la república y estuvieron a punto de cometer un golpe de estado.
Posteriormente hubo un cambio de gobierno y de sector político, donde jóvenes sin experiencia alguna para gobernar, pero muy habilosos y avezados para arrasar con las arcas fiscales, como también apitutar a sus amigos, además de premiar a esa primera línea, que les ayudaron a conseguir lo planificado, como es el poder para destruir nuestro país, hoy están finalizando la peor pesadilla de todos, y ese legado es lapidario en todos los ámbitos de nuestras vidas.
Hoy recordamos que pasaba hace 6 años, desde ese fatídico día 18 de octubre 2019, donde los adultos mayores tenían que estar encerrados en sus casas, sin poder ir a sus consultorios, sin poder hacer los trámites de pensión, donde el caos era generalizado, donde debíamos defender con palos a esas lacras enajenadas que destruían supermercados, quemaban estaciones de metro, kioskos, pequeños negocios, posteriormente el gobierno los premiaba con pensiones de gracias, sobre los $ 500.000 por favor concebido.
Recordar es bueno, para no cometer los mismos errores, como es permitir que la odiosidad, la “rebeldía de hijitos de papito”, que se dieron el gusto de destruir al país más exitoso de Sudamérica, convertirlo en un antro de delincuentes foráneos e ilegales, quienes no trepidan en asesinar a quien se resiste a sus delitos con el aval del estado, con un estancamiento económico, con listas de espera de salud nunca antes visto, con una educación por el suelo, y la delincuencia en las nubes. Nunca más un voto perdido, nunca más votar por incapaces e ideologizados cuyo objetivo es enriquecerse a costa de los más vulnerables. Debemos cambiar el rumbo para volver a crecer y despertar de esta pesadilla de cuatro años y de este error llamado “el peor gobierno de nuestra historia”.
Escrito para El Diario de Santiago por Margot Guerrero Bruner
Asesora Previsional
Corredor de Seguros
www.margotpensiones.com