Increíble, pero nuevamente la liga chilena se decide en el escritorio. Hay una guerra total con el programa Comet, el cual es un software autorizado por la FIFA para todas las competiciones del futbol. Eso sí, en la actualidad tiene un vacío legal, el cual tiene en disputa a dos clubes de la primera B que incluso podría permitir que un club descienda a la segunda división.

Este instrumento fue creado en el año 2003 y recién en 2014 llegó a Sudamérica como parte de un «proceso de modernización». Lo que sucede es que tiene varios ítems y entre ellos uno denominado “Otros”. Ahí usted inscribe a una persona sin mencionar cuál será su papel dentro del cuerpo técnico; el resto está identificado con su cargo.

Los técnicos alzan la voz porque esto va en desmedro de la profesión. Esto da para que los directivos sigan haciendo trampa – perfectamente – y, muy hábiles ellos pueden pueden inscribir a un segundo técnico sin que nadie lo identifique como tal.

Por su parte, Francisco Contreras, técnico formativo, expresó: «No puede ser, hace poco tuve que sacar mi licencia pro y pagar 50.000 por dos cursos de 20 hrs para la acreditación, es impresentable».

Finalmente, fue consultado Carlos Ramos, presidente del Colegio de técnico, quien comentó que «si no tiene licencia Pro nacional, que es la que lo habilita, no puede dirigir. Solo sé que Paredes (Esteban) tiene clase A».

Como siempre, el futbol chileno se decide en el escritorio y no en la cancha.

Por Eduardo Italo Mella