En septiembre de 1992, el extinto Consejo Coordinador de Seguridad Pública —del Gobierno del Presidente Patricio Aylwin— realizó un informe sobre el grupo Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), mostrando los nombres de todos los miembros de la agrupación que habían sido detenidos.
Entre ellos estaba el de José Luis Robles Aros, capturado por Carabineros el 28 de agosto de 1992. Más de tres décadas después, el exfrentista vuelve a hacer noticia: este miércoles fue detenido por su presunta participación en el frustrado y fatal robo al Aeropuerto de Santiago, ocurrido en marzo de este año.
Sin embargo, entre su detención en el siglo pasado y este año, el criminal conocido como «El Pape» ha protagonizado una serie de delitos. El atraco que protagonizó en la losa del recinto aeroportuario es uno más en su larga lista de criminalidades.
A inicios de la década del ’90, Robles Aros planificó la serie de robos que cometió el FPMR por aquellos años. En 1992, también participó en el asesinato del subprefecto de la Policía de Investigaciones (PDI), José Carlos Silva, abatido a tiros por tres antisociales.
Con el paso del tiempo, su experiencia criminal fue creciendo. En 2005, el «El Pape» ya registraba una condena de diez años de cárcel por haber protagonizado un robo con intimidación en 2002.
Aquel año protagonizó un hecho similar al que pretendía cometer en marzo pasado: lideró un asalto a un camión de valores, al que le sustrajeron más de $400 millones.
Por si fuera poco, también fue acusado de robo frustrado, estafa frustrada e infracción a la Ley de Armas, según señala un artículo de prensa.
La detención de 2005 derivó en el envío de José Luis a la Cárcel de San Miguel. Ya en septiembre de 2013, el sujeto estaba en libertad, pero en vez de redireccionar su vida, volvió al crimen.
La versión policial de los hechos fue que el sujeto fue a visitar a su hija, quien vivía con su madre en la comuna de Pedro Aguirre Cerda, en la Región Metropolitana.
Ahí se había encontrado con el conviviente de su expareja, protagonizando una grave discusión que terminó en un asesinato: «El Pape» lo apuñaló con un arma cortopunzante y se dio a la fuga.
Prófugo de la justicia se mantuvo hasta marzo de 2016, cuando fue capturado en el Aeropuerto Arturo Merino Benítez, mismo lugar en el que intentaría realizar un millonario asalto siete años más tarde.
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