A lo largo de la historia, la humanidad siempre ha albergado un gran interés por el fin del mundo. De hecho, en la mitología de diferentes culturas antiguas hay un relato dedicado para explicar cómo ocurrirá el fin de todo, como es el caso del Ragnarok.

Aunque actualmente no existe evidencia científica sólida que respalde dichas creencias, cada cierto tiempo surgen teorías y predicciones sobre un inminente apocalipsis. Una de las fechas más recientes en la que se ha centrado la atención es 2023.

A raíz de esta situación, algunos cibernautas han acudido la inteligencia artificial (IA) como un recurso para tener una visión alternativa ante las creencias y teorías que sugieren que el fin del mundo podría ocurrir en este año.

¿Por qué se dice que en 2023 ocurriría el fin del mundo?

Teoría del fin del mundo maya
De acuerdo con ChatGPT, una de las predicciones más famosas que están asociadas con el fin del mundo es la profecía maya, la cual planteó que el mundo terminaría en 2012. Pese a que dicha profecía nunca se cumplió, algunos defienden la teoría de que el fin del mundo se producirá en 2023, argumentando que los mayas cometieron un error en sus cálculos y que, en realidad, el verdadero final del mundo se retrasó hasta 2023.

Sin embargo, la IA destaca que la teoría basada en una profecía maya ha sido ampliamente desacreditada por expertos en arqueología y calendarios mayas.

Impacto de un asteroide
Según el chatbot de OpenAI, algunas voces afirman que en 2023 la Tierra sería impactada por un asteroide colosal. Si bien es cierto que existen asteroides que orbitan cerca de la Tierra y que representan una amenaza potencial para nuestro mundo, por ahora la comunidad científica no ha detectado un cuerpo espacial con trayectoria de colisión hacia nuestro planeta.

De manera que la probabilidad de que la humanidad perezca en 2023 por culpa de un asteroide es extremadamente baja. Actualmente, científicos y astrónomos monitorean constantemente el espacio en busca de objetos cercanos a la Tierra y así tener la capacidad de prever una amenaza peligrosa con meses e incluso años de antelación.

Profecías religiosas
ChatGPT señala que las profecías religiosas también han sido una fuente recurrente de teorías y especulaciones sobre el fin del mundo. Algunas personas asocian eventos que han ocurrido recientemente con situaciones que han sido mencionadas en textos religiosos. Esta situación ha causado que se hable sobre una gran catástrofe en 2023.

No obstante, estas profecías apocalípticas son interpretaciones altamente subjetivas y por ello no existe un componente científico que permita darles alguna validez.

Cambio climático y catástrofes Naturales
El cambio climático y las catástrofes naturales actualmente han generado una gran preocupación sobre el futuro de la humanidad y el planeta Tierra. De hecho, algunos expertos, como Bill Gates, han manifestado que dicha situación podría desatar una crisis irreparable que causaría el fin de la vida como la conocemos.

Sin embargo, voces han afirmado que en 2023 se podría generar un aumento significativo en la aparición de eventos climáticos extremos, como huracanes, inundaciones, olas de calor y sequías, eventos que podrían producir un colapso global.

La IA de ChatGPT destacó que el cambio climático sí es una situación apremiante que requiere atención, pero descarta la posibilidad de que en los meses que quedan de 2023 se produzca un desastre natural con la fuerza para acabar con la vida en la Tierra.

Predicciones basadas en la numerología
El chatbot reseña que algunas personas han realizado cálculos numéricos basados en fechas y eventos históricos para argumentar que el año 2023 tiene un significado especial y que marcaría el fin del mundo. No obstante, la inteligencia artificial destaca que la numerología carece de fundamento científico y por ello no es posible darles mucho crédito a las predicciones que plantea.

Teorías basadas en conspiraciones
Las teorías de conspiración sobre predicciones apocalípticas también han cobrado una gran fuerza gracias a las redes sociales. Algunas de ellas sugieren que gobiernos secretos o grupos poderosos están planeando un evento catastrófico en 2023 para consolidar su control sobre la humanidad. No obstante, el chatbot señala que esas teorías suelen carecer de evidencia creíble y a menudo se basan en suposiciones sin fundamento.

En conclusión, muchas de las teorías y creencias sobre el fin del mundo en el año 2023 carecen de fundamento científico sólido y en su mayoría se basan en especulaciones infundadas e interpretaciones subjetivas.

Es importante recordar que los científicos, astrónomos y expertos en diversas disciplinas están constantemente monitoreando y evaluando los riesgos potenciales que enfrenta nuestro planeta, desde asteroides hasta el cambio climático.

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