Wall Street registró su mejor día desde enero, después de que Meta Platforms se convirtiera el jueves en la última gran empresa tecnológica en superar las expectativas de beneficios y de que los informes ofrecieran un panorama desigual de la economía estadounidense.

El S&P 500 subió un 2% y borró todas sus pérdidas de lo que había sido una semana difícil hasta ahora. El Promedio Industrial Dow Jones subió un 1,6%, mientras que el índice compuesto Nasdaq lideró el mercado con un avance del 2,4 por ciento.

La empresa matriz de Facebook era la que más subía, con un 14,6%. Meta no sólo batió las estimaciones de los analistas en cuanto a beneficios durante los tres primeros meses del año, sino que también dio una previsión de ingresos que superó las expectativas.

La mayoría de las empresas han superado las previsiones en lo que va de temporada de presentación de resultados. Pero las expectativas eran en general bajas al inicio de esta temporada de resultados debido a una inflación todavía elevada, unos tipos de interés mucho más altos y una economía en desaceleración.

Un informe publicado el jueves dio el primer indicio de hasta qué punto se está ralentizando la economía estadounidense: hasta un crecimiento anual estimado del 1,1% durante los tres primeros meses de 2023, frente al 2,6% de finales del año pasado. Se trata de una desaceleración peor de lo esperado, pero la economía puede estar en mejor forma de lo que parece.

Bajo la superficie, el informe mostró fortaleza en el núcleo de la economía, con una aceleración del crecimiento del gasto de los consumidores y de otras áreas. Gran parte de la debilidad se debió a la reducción de las existencias de las empresas. Sin embargo, los datos también incluían una medida de la inflación que la Reserva Federal prefiere utilizar y que resultó ser más alta de lo esperado.

Un informe separado mostró que menos trabajadores solicitaron prestaciones por desempleo la semana pasada, lo que aumenta la esperanza de que el mercado laboral pueda seguir resistiendo mientras otras áreas se ralentizan.

Alexandra Wilson-Elizondo, codirectora de gestión de carteras de soluciones multiactivos de Goldman Sachs Asset Management, afirmó: “En nuestra opinión, todos estos datos contradictorios nos indican que estamos en la fase del ciclo de ‘flexión, no ruptura’”.

En conjunto, los inversores interpretaron los datos en el sentido de que la Reserva Federal considerará la semana que viene que la economía sigue lo bastante fuerte como para afrontar otra subida de los tipos de interés en su próxima reunión.

La Fed lleva subiendo los tipos a un ritmo vertiginoso desde principios del año pasado, hasta el nivel más alto desde 2007 desde su mínimo histórico. Lo hace con la esperanza de controlar la elevada inflación del país, pero los tipos altos lo que hacen es ralentizar toda la economía y perjudicar los precios de las inversiones.

Los rendimientos del Tesoro subieron inmediatamente después de que los informes económicos llegaran a Wall Street, ya que los operadores aumentaron sus previsiones para la Fed y los tipos. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años subió al 3,52% desde el 3,45% del miércoles. Contribuye a fijar los tipos de interés de las hipotecas y otros préstamos importantes.

El rendimiento a dos años, que se mueve más en función de las expectativas de la Reserva Federal, subió de forma más agresiva, hasta el 4,08% desde el 3,95%.

Los tipos elevados han afectado con especial dureza a algunos sectores de la economía, como la vivienda y la industria manufacturera. Los bancos también se han visto presionados por el temor a que sus clientes, asustados, retiren de golpe todos sus depósitos.

Lo que más preocupa es que los problemas del sector bancario puedan provocar un retroceso del crédito en toda la economía. Eso, a su vez, podría apretar aún más los frenos, actuando casi como otra subida de los tipos de interés.

Por ello, muchos inversores se preparan para una posible recesión este año, lo que podría afectar aún más a los beneficios empresariales. Por eso los inversores han prestado tanta atención, si no más, a lo que dicen las empresas sobre las próximas tendencias que a lo que han hecho en los últimos tres meses.

En los mercados extranjeros, los índices bursátiles fueron mixtos en Europa y subieron ligeramente en gran parte de Asia.

(Con información de AP)

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