Este lunes 27 de noviembre, marcó el inicio de una nueva etapa para más de 287 mil estudiantes que participarán en la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES) en Chile. Sin embargo, más allá de la prueba en sí, la atención se centra en el crucial paso que sigue: la elección de la universidad. Ante la diversidad de opciones, surge la pregunta: ¿Qué aspectos considerar a la hora de elegir una universidad?
Desde la Universidad Bolivariana enfatizan en la importancia de indagar en el prestigio y la historia de la institución. Al respecto, Carlos Cáceres, presidente de la junta directiva de la Institución comentó que “hay que fijarse en la acreditación institucional y verificar si cumple estándares de calidad o si está en proceso de acreditación”
“También es importante la reputación de los académicos, conocer a los profesores, los directores y conocer la trayectoria académica de cada uno”, añadió.
Otro punto relevante para Cáceres es conocer la oferta académica y entender cuál es la especialidad de esa universidad, si son los negocios, las ciencias sociales, las artes, las letras o la ingeniería.
En cuanto a la infraestructura, desde la Universidad Bolivariana indican que “hay que fijarse muy bien en los recursos con que cuenta y las instalaciones. A ver si tiene convenio de pasantía, práctica y si hay instancias de investigación”.
“También hay que considerar y observar si hay una vida estudiantil, si hay actividades extracurriculares, porque eso es importante para el desarrollo personal y profesional”, destacó Cáceres, haciendo además mención a fijarse la ubicación y la facilidad de transporte para acceder.
Como últimos puntos, llamó a analizar la capacidad financiera que se tiene y saber si la universidad tiene algún tipo de posibilidad o convenio de internacionalización.
Desde el aspecto más emocional, Isaías Sharon, psicólogo laboral, doctor en educación y nuevas tecnologías y fundador de HPI International comentó que al momento de elegir una carrera es importante “pensar en aquello que a uno le gusta, los temas de interés que se tienen para poder, idealmente, apasionarse y sentir esa vocación no del quehacer, sino del saber en particular. Esto es importante porque un 60% de las personas no trabaja en el área que estudió, pero aplica lo que aprendió en diferentes contextos laborales”.
“Por otra parte, considerar el tipo de comunidad donde quiere relacionarse. La educación superior es también un lugar donde hacer amistades, conocer personas diferentes y abrir oportunidades por medio de estas relaciones, elegir el entorno y perfil socio-cultural que se busca, también puede ayudar a que sea una mejor experiencia”, explicó.
El experto indicó que este punto es importante, ya que “casi un tercio de los estudiantes desertan por no sentirse a gusto con las personas con quienes comparte en el día a día”.
Finalmente, recomendó “revisar bien el enfoque de la carrera y la institución, si es más centrada en lo académico, en lo práctico, en la empleabilidad o el emprendimiento, esto ayudará a elegir un lugar que converse de mejor forma con los intereses y vocaciones de cada estudiante”.