Con 79 votos a favor, 61 en contra y una abstención, la Cámara de Diputados aprobó la cuestión previa que presentó el ministro de Vivienda Carlos Montes y se cayó la acusación constitucional en su contra.

Pese a los esfuerzos, la oposición no logró convecer a las fuerzas políticas no alineadas como la Democracia Cristiana, el Partido de la Gente, Amarillos y Democrátas para avanzar el libelo acusatorio, quienes terminaron respaldando al secretario de Estado.

Tras el fracaso de la acusación, la diputada Sara Concha (Partido Social Cristiano) – una de las impulsoras del libelo – dijo que «lamento que todo el argumento de la defensa esté enfocado en la forma y no en el fondo del tema tan grave que hoy día estamos tratando. En verdad hay un tema de responsabilidades políticas que yo lamento que el ministro no las haya asumido antes».

«Respecto a la redacción o los errores de redacción, recordemos que nosotros presentamos incluso una filtración del texto que ya teníamos listo, se incorporaron más elementos, otros capítulos por parte del Partido Republicano, que yo lamento que a lo mejor en la rapidez se cometieran estos errores de redacción y que finalmente fuera una excusa para que quienes hoy día están defendiendo al ministro se enfocaran en eso y no en el problema en general con el cual estamos enfrentándonos a esta acusación», agregó.

Por su parte el diputado Cristián Labbé (UDI), miembro de la comisión revisora, sostuvo que «la mayoría de los chilenos no entiende cómo un ministro que se le robó, que le allanaron su Ministerio, que hay seremis presos, que hay una subsecretaria que fue cesada de las funciones. Ojo, que en ese Gobierno siempre pagan los platos rotos las mujeres y así lo hemos visto para atrás. Lo que está pasando acá es que el Presidente no está conduciendo este país como los chilenos esperan, lo que hoy buscamos son responsabilidades políticas, estamos en la Cámara de Diputados y tenemos las herramientas suficientes, las hemos usado y las seguiremos usando (…) a los parlamentarios nos eligieron miles de personas, al ministro solo una, nosotros somos los representantes».

Asimismo, el diputado Cristian Araya (Republicano) indicó que «hoy a triunfado la impunidad, hoy han triunfado aquellos que están por esconder debajo de la alfombra la corrupción. Es evidente que el ministro Montes es el responsable político de su cartera y del escándalo de corrupción que ha ocurrido. Es muy lamentable que algunos parlamentarios estén dispuestos a privilegiar sus buenas relaciones con el Gobierno o su amistad personal con el ministro, por sobre la agenda de probidad».

Oficialismo

El diputado Gonzálo Winter (CS), tras la votación en sala, dijo que «otra mañana perdida en el Congreso con una acusación constitucional que carecía de todo fundamento. No solamente carecía de todo fundamento, sino que habíamos bajado a un nivel inferior, en donde ni siquiera tenía pie de página, los números de las hojas, etc. Y en donde en ningún momento se estableció hecho alguno imputable al ministro Montes que tuviera que ver con aquello que la acusación decía sostener. Aquí lo importante es volver a enfocarse en la crisis habitacional que es gravísima que hay en nuestro país y que los convenios irregulares se han investigado con toda la fuerza de la ley en su arista más filosa».

Asimismo, el diputado Jorge Brito (RD) sostuvo que «era una acusación que no cumplía con los requisitos mínimos de admisibilidad, y eso fue el resultado en esta primera instancia. El llamado a la bancada del Partido Republicano: uno es a fortalecer sus equipos porque no logran generar escritos que sean admisibles y dos a centrar sus energías en mejorar la situación de las familias trabajadoras; trabajar en la reforma de pensiones por ejemplo que se han opuesto a tramitar».

Por su parte, la diputada Marta González (IND-PPD) señaló que «dijimos desde un comienzo esta acusación no tiene sustento, no está bien formulada y además no tiene el peso que necesita una acusación constitucional que es el máximo de sanción que puede otorgar la Cámara».

Finalmente, el diputado Daniel Manouchehri, jefe de la bancada del Partido Socialista, dijo que «hoy día hemos perdido valioso tiempo que debimos haber destinado a discutir proyectos de importancia para los chilenos en una acusación que no tenía ningún fundamento ni jurídico ni político. La pregunta de fondo a la oposición es qué ganó Chile con su acusación ¿Mejoró la seguridad? ¿Mejoraron las pensiones? ¿Mejoró la vivienda de las personas? Nosotros creemos que acá se deben revisar los mecanismos para evitar que parlamentarios ociosos estén presentando todos los meses acusaciones constitucionales que solo son un show político».

/gap