El viernes se produjo un receso en el juicio oral se está llevando adelante en el Cuarto Tribunal Oral en lo Penal de Santiago contra el excarabinero Sebastián Zamora, quien es acusado por la Fiscalía Metropolitana Centro Norte de homicidio frustrado e contra de un adolescente el 2020, luego de que este cayera del Puente Pío Nono durante manifestaciones del estallido social.
Ese día, la fiscalía llevó a estrado a detectives de la Policía de Investigaciones. Uno de ellos, el comisario Carlos Arriagada, con un fotograma reconstruyó cómo se produjo la caída del joven tras el impacto con el exuniformado.
De acuerdo al diario La Segunda, el detective prestó un relato que va en sintonía con lo planteado por la defensa, vale decir, que Zamora no empujó al manifestante, sino que la caída se produjo por un choque en el contexto de una detención fallida.
“En el punto de impacto hay una imagen de colisión, de impacto (…), el funcionario y la víctima tienen ese encuentro. Esto es a las 19.35 horas con 19 segundos y 19.35 con 20 segundos. Al momento de la colisión y la caída, no se pudo determinar en detalle la caída, no se pudo determinar que lo empujó”, dijo.
“La colisión dura un segundo, el carabinero se desplaza hacia el norte por el puente Pío Nono. Hace un intento como de frenado”, agregó.
Luego, pasó a estrado el inspector de la Brigada de Derechos Humanos de la PDI, Giovanni Villalobos, quien fue interrogado por los abogados de Zamora, Alejandro Peña y Vinko Fodic. Los profesionales consultaron al policía si se había llegado a la conclusión de que el imputado había tomado a la víctima por los pies para luego impulsarlo al río. El PDI respondió que “no”.
El juicio está programado para que se retome el 1 de julio. Las audiencias por este juicio comenzaron el miércoles 22 de mayo. Durante este período fue la fiscalía la que presentó sus pruebas, así como también se efectuaron las exposiciones de los querellantes. Al retorno será el turno de la defensa. Luego de eso, las réplicas y los alegatos de clausura.
El segundo día de juicio, el 23 de mayo, Sebastián Zamora prestó testimonio ante el estrado.
En lágrimas, dijo: “Nunca pensé que al ejercer la acción de querer detenerlo, este pudiera caer al río. Yo retrocedí buscando qué hacer, desorientado, en shock; retrocedo y los manifestantes se nos vinieron encima”.
La Fiscalía Metropolitana Centro Norte pide para él una pena de 8 años de cárcel. Como querellante en el caso figura además el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), que suma a la acusación contra el exfuncionario policial un delito de apremios ilegítimos. La Defensoría de la Niñez y el diputado Tomás Hirsch también son querellantes.
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