Cómo empezó todo
Suele datarse el origen de los videojuegos en 1952, aunque también en 1958, dependiendo de lo que se quiera entender por “Video juego”. En el primero de esos años, se creó y dió a conocer el “OXO», una versión electrónica del popular “Tres en línea”.
Mientras que en 1958 vió la luz el “Tenis para dos”, simulador del tenis de mesa. Era el primero en posibilitar la participación de dos jugadores. Más tarde, en 1962, Steve Russell, del Instituto de Tecnología de Massachusetts, desarrolló el “Spacewar”, primero en utilizar gráficos vectoriales, y también el primero en ser pensado para una computadora, pese a que en ese tiempo distaban enormemente de ser algo masivo.
En 1966 Ralph Baer desarrolló un videojuego llamado “Fox and Hounds”, iniciando la era de los videojuegos domésticos. Y luego llegó “Magnavox Odyssey», primer sistema de juegos (comercializado desde 1972) que se conectaba al televisor hogareño para jugar con divertimentos que ya estaban instalados en el dispositivo. Faltaban décadas para los juegos online, pero el camino estaba abierto.
Hardware, Software y más allá
La década del 70’ fue la de la consolidación de los videojuegos como industria, con la masificación de títulos como “Space invaders” o “Galaxy wars”, una versión más sofisticada del “Tenis para dos” llamada “Pong” (que por cierto generó una cruenta batalla judicial por patentes) y el surgimiento de un gigante como Atari, que marcaría rumbos en el negocio.
En los 80’ fue la explosión de los salones de videogames, lo que le dio a la industria un impulso enorme, por el desarrollo de máquinas que requirió. Y aparece otro gigante: Nintendo, que también reclama y obtiene una enorme porción del mercado a partir de 1983, año del lanzamiento de su consola NES, ya con las funciones básicas de las que conocemos hoy. Y títulos que también llegan hasta nuestros días con categoría de leyenda: Donkey Kong, Zelda, Super Mario o Sonic.
Internet en el centro de todas las cosas
Los juegos online, tal como los conocemos hoy, no solo son posibles vía consolas, lo sabemos, sino también con PCs o dispositivos móviles, y también “híbridos”. A la par que todo eso evoluciona, también lo hace la conectividad; cuando ya hablamos de octava generación de consolas, vemos que Internet es primordial para todas, e incluso algunas no pueden funcionar sin ella.
En 2019 Google presentó “Stadia”, una plataforma online de juegos que no necesita de un dispositivo de procesamiento físico: los juegos se procesan inmediatamente en los servidores de la empresa, y se juegan en un SmartTV. Entonces no hay que sorprenderse si (sumando el desarrollo del “Metaverso”) muy pronto las consolas como las conocemos hoy se vuelven anacrónicas.