Ahora que la pandemia del Covid-19 pasa casi desapercibida -de acuerdo al último balance hay 38 nuevos contagios y ocho pacientes en UCI-, uno de los principales desafíos sanitarios a largo plazo que enfrenta el Ministerio de Salud son las listas de espera, las que alcanzaron las cifras más altas desde que hay registro como consecuencia, precisamente, del coronavirus.

De acuerdo al último informe que envió la cartera sanitaria a la Cámara de Diputados, 10.477 personas fallecieron esperando una atención durante el primer cuatrimestre del 2023. De ellas, 9.139 aguardaban una consulta médica, 648, odontológica, y 660, una quirúrgica.

El exsubsecretario de Redes Asistenciales Luis Castillo sostiene que “es muy probable que exista una relación entre la espera y la muerte de los pacientes, puede que no sea directa, pero hay una correlación muy definida, especialmente para algunas enfermedades como las oncológicas y las cardiovasculares”.

Por otro lado, el académico de la Facultad de Salud y Odontología de la Universidad Diego Portales, Óscar Flórez, explica que para ingresar a las listas de espera, las personas tienen una primera consulta, por ende, esta espera tiene más relación con el tratamiento.

“El paciente que ingresa a la lista, las cuales se extendieron por pandemia, no resuelve inmediatamente su problema y no tiene tratamiento oportuno y ahí es donde se deteriora la patología, por lo que los pacientes pueden fallecer. Decir que a las 10.447 personas fallecieron esperando alguna atención médica no es completamente cierto, porque para ingresar a la lista ya tuvieron una, lo que no han tenido es el tratamiento”, puntualiza.

El especialista también añade que hay otros riesgos asociados a la espera: “El paciente puede generar diversos problemas mientras aguarda, como el deterioro de su misma enfermedad o el desarrollo de problemas asociados a la salud mental, pues una persona que está con un problema que sabe que tienen que resolver y que no tiene fecha de resolución, comienza a generar problemas relacionados con la incertidumbre”.

Balance nacional

De acuerdo al mismo informe, la mediana de espera para consultas de nueva especialidad es de 257 días, con un total de 2.259.328 registros. Por otro lado, se contabilizan 302.267 intervenciones quirúrgicas, con una mediana de espera de 326 días.

En los menores de 15 años, la especialidad que mayor número de personas en espera tiene es la otorrinolaringología, con 41.296 casos. Lo mismo ocurre en el rango etario de los mayores de 65 años, pues 93.548 también están esperando una atención de esta especialidad.

Castillo, quien también es decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de Universidad Autónoma, explica que esto ocurre porque “hay un universo muy grande, especialmente en la población infantil, que aguarda una consulta de esta especialidad por adenoiditis y amigdalitis; y segundo, porque el número de (médicos) otorrinos, pese a que ha aumentado, aún no es suficiente”.

Mientras que la especialidad médica con mayor número de personas en espera -en el rango etario entre 15 y 64 años- es la oftalmología, con 201.867 casos.

Respecto a las listas de espera quirúrgicas, las que más tienen registros en el caso de los menores de 15 años son las relacionadas con la urología y nefrología, con 11.194 casos.

En el caso de las personas entre 15 y 64, las intervenciones quirúrgicas que más acumulan pacientes son las relacionadas con la traumatología, con 45.325 personas en espera. Lo mismo ocurre con los mayores de 65 años, pues 25.206 de ellos también esperan por este procedimiento.

Medidas

En la cuenta pública de este año, el Presidente Gabriel Boric calificó el trabajo en las listas de espera como “un gran logro”. Y es que, según el balance que el mismo Mandatario entregó, la lista de espera para consultas de especialidad (médicas y odontológicas) alcanzó 2.229.758 registros, pero en 2022 llegó a las 2.023.741 atenciones. Aunque la lista aumentó un 11,2% respecto del año pasado, la mediana de tiempo de espera disminuyó de 336 a 261 días, lo que corresponde a una baja del 22,3%. Mientras que hasta el pasado 31 de marzo la lista de espera asociada a intervenciones quirúrgicas anotó 304.812, con una mediana de espera que llegó a los 330 días. El año pasado, hasta esa misma fecha, eran 330.452 las intervenciones en espera, con un retraso de 490 días, es decir, se configuró una disminución del 32,7% en cuanto a tiempo.

Para reducir la lista de espera, el Ministerio de Salud creó el Plan Nacional de Recuperación de Cuidados y Disminución de Tiempos de Espera, que coordina el subsecretario de Redes Asistenciales. Y una de las principales estrategias era aumentar la producción asistencial, para eso se extendieron los horarios de trabajo de los centros de salud y también para concretar más intervenciones se optó por realizar procedimientos en días inhábiles, logrando así 20.639 cirugías más a finales del año pasado. También se trabajó para recuperar pabellones que estaban en desuso: en marzo de 2022 había 106 quirófanos fuera de operación y en el corte de octubre de 2022 había 63.

/psg