Siguen las repercusiones por las indicaciones presentadas a la reforma a la Ley de Pesca promovida por el Gobierno. En junio se dio a conocer que un grupo de parlamentarios de oposición presentó un conjunto de 211 indicaciones copiadas de un informe técnico-jurídico gremial de la empresa pesquera Sonapesca.

Sumado a esto, en los últimos días se produjo una nueva controversia. En este caso, la discusión se relacionó con una indicación patrocinada por el diputado Jorge Brito (FA) -y formulada por Fundación Veg- que buscaba establecer una política de protección a recursos marinos “sintientes”.

Quien se sumó al debate fue el exministro de Economía durante el Gobierno de Sebastián Piñera, Pablo Longueira. A través de una carta publicada en El Mercurio, el exparlamentario y expresidente de la UDI se refirió a la controversia sobre los recursos marinos sintientes, y realizó una comparación con el aborto.

¿Qué dijo Longueira sobre la indicación a la Ley de Pesca?

En el texto, Longueira plantea que “a pocos días de anunciar el proyecto de ley del aborto libre, podemos concluir que para algunos del Frente Amplio (FA), un niño por nacer, en un ambiente acuático en el vientre de su madre, vale menos que un pez”.

Posteriormente, apunta a que “leemos en la prensa que el FA presentó una indicación para respetar el estado ‘físico y mental’ de seres acuáticos ‘sintientes’, en la Nueva Ley de Pesca”.

A continuación, señala un punto en particular de la indicación y posteriormente, entre paréntesis, comenta su teoría sobre su trasfondo. “Se señala: ‘El Estado establecerá los mecanismos necesarios para garantizar el correco manejo de los recursos hidrobiológicos sintientes en la pesca industrial’ (los peces que pescan los Pescadores artesanales están excluidos. Ahora se entiende por qué el subsecretario de Pesca quiere que los industriales pesquen fuera de las 200 millas)”.

Posteriormente, indicó que “se define como ser sintiente al ‘Animal acuático capaz de tener experiencias y reaccionar a estímulos externos de manera consciente, considerado por este hecho sujeto de consideración moral y respeto’”.

Finalmente, remató su carta con una única frase: “A lo que hemos llegado“.

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