Un difícil inicio de año y un futuro inmediato preocupante es el que vislumbra la Cámara Chilena de Construcción (CChC) para el sector, gremio que presentó este jueves su informe Macroeconomía y Construcción (MACh 64).

De acuerdo al documento expuestos por el presidente de la CChC, Juan Armando Vicuña, se estima que en 2023 la inversión en la construcción caiga con fuerza 5,9% en términos anuales, principalmente por la importante contracción de las inversiones en infraestructura productiva, tanto del sector privado como de las empresas autónomas del Estado.

Esto, a su vez, se traduce en menos empleo. En el primer trimestre del año se destruyeron más de 46.000 puestos de trabajo en la construcción respecto del mismo período de 2022, faltando por recuperar cerca de 60.000 plazas para igualar el mejor registro de la industria.

Cifras preocupantes, a ojos de Vicuña. «Esta situación nos motiva a hacer un llamado a tomar medidas concretas para proteger los puestos de trabajo y crear nuevas plazas, impulsando la inversión y trabajando fuertemente en reducir la burocracia, la permisología y respetando la certeza jurídica. Ahora es el momento de hacerlo».

Con todo, no todo son noticias negativas, y es que desde el gremio destacaron un retroceso de los precios de los materiales e insumos que usa la industria. Así, durante el primer trimestre, los precios aumentaron 5,9% anual, lo que se compara favorablemente con el alza promedio de 25,1% anual registrado el año pasado.

Por otra parte, se proyecta que la inversión en infraestructura caiga 5,8% anual por un alza de 1,3% en doce meses de la inversión en infraestructura pública -aunque a marzo la ejecución presupuestaria del MOP mostraba un retroceso aual de 36% en monto ejecutado-, además de una severa contracción de 13,3% en doce meses de la inversión en infraestructura productiva.

Sobre esto último punto, la Corporación de Bienes de Capital señala en su informe más reciente que este año la inversión productiva sería 34% menor que la de 2022, que el gasto en construcción productivo privado se contraería 43% en relación con el año pasado y que el gasto en el sector productivo público y de empresas autónomas del Estado retrocedería 12%.

En vivienda, se proyecta una caída anual de la inversión de 6,2%. La inversión en vivienda pública se contraería 4,4% en doce meses, mientras que en la vivienda privada la disminución sería de 6,6% anual.

Para el año, se estima que en Santiago se comercializarán cerca de 25.000 viviendas en el presente año y hasta 30.000 en 2024. De esta forma, y luego del retroceso de 29% en 2022, se esperan ritmos de crecimiento anual entre 22% y 17% en el 2023 y el 2024.

Propuestas para impulsar la inversión

Ante este escenario, Vicuña propuso ejes acción para impulsar la inversión, planteando la idea de una Política Nacional de Promoción de Inversiones que contemple pactos de invariabilidad tributaria y planificación de largo plazo en materia de infraestructura y desarrollo urbano y territorial, creándose la institucionalidad que la hagan posible.

Además, el líder gremial apuntó a mejorar la calidad regulatoria a través de la modernización de normativas que regulan la relación Estado-contratistas, aplicación de medidas propuestas por la Comisión Nacional de Evaluación y Productividad y fortalecimiento de la certeza jurídica que necesitan los proyectos de inversión.

Por último, esgrimió la necesidad de que se garantice la seguridad pública y erradicar la violencia en sus distintas expresiones.

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