El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de San Antonio condenó a 14 años de presidio a un masajista que violó y abusó sexualmente de cuatro clientas en su consulta privada, en la comuna de Llolleo.

Los hechos ocurrieron entre los años 2016 y 2020, cuando las víctimas se encontraban a solas con él en su box, “mientras les efectuaba un masaje y ellas se hallaban recostadas en la camilla”, relató la fiscal especializada en delitos sexuales, Javiera Torres Sandoval.

Agregó que las víctimas se encontraban “totalmente vulnerables porque estaban semidesnudas, en un lugar cerrado, a ratos boca abajo en la camilla, algunas boca arriba con sus ojos tapados y en estados tanto físicos como emocionales que les impedían reaccionar debidamente”.

El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de San Antonio condenó a 14 años de presidio a un masajista que violó y abusó sexualmente de cuatro clientas en su consulta privada, en la comuna de Llolleo.

Los hechos ocurrieron entre los años 2016 y 2020, cuando las víctimas se encontraban a solas con él en su box, “mientras les efectuaba un masaje y ellas se hallaban recostadas en la camilla”, relató la fiscal especializada en delitos sexuales, Javiera Torres Sandoval.

Agregó que las víctimas se encontraban “totalmente vulnerables porque estaban semidesnudas, en un lugar cerrado, a ratos boca abajo en la camilla, algunas boca arriba con sus ojos tapados y en estados tanto físicos como emocionales que les impedían reaccionar debidamente”.

De acuerdo a la sentencia, el hombre les realizaba “algunas con tocaciones en sus partes íntimas y a otras derechamente accediéndolas carnalmente contra su voluntad”.

“SABÍA QUE NO TENÍA CONSENTIMIENTO”

La fiscal detalló que los hechos ocurrieron sin ningún tipo de consentimiento en todos los casos, pues “el imputado sabía lo que estaba haciendo, sabía que no tenía el consentimiento de las víctimas”.

“También una testigo fue capaz de decirle que parara y le reprochó al acusado de esta situación antes de la primera denuncia y le dijo que tendría problemas”, agregó la persecutora a cargo de la investigación.

De esta manera, el tribunal condenó al acusado a la pena de cinco años y un día de presidio por una violación; tres años y un día por una segunda violación; tres años y un día por abuso sexual propio y otros tres años y un día por un segundo abuso. En total 14 años de presidio, que deberá cumplir de manera efectiva y privado de libertad, destacó la Fiscalía.

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