Los altos niveles de evasión han sido un problema constante desde que se implementó el Transantiago en 2007, lo que ha afectado el sistema de financiamiento del transporte público de la capital, que requiere ser sostenido con un subsidio estatal permanente.

La evasión se había mantenido en torno al 20% hasta inicios de 2019. Sin embargo, luego el 18-O la cifra superó el 30% (en el tercer trimestre de 2019) y en el año 2020 sobrepasó el 40%, marcando un récord de 46,2% en el segundo semestre de 2020.

Ahora el Directorio de Transporte Público Metropolitano dio a conocer un nuevo informe sobre la evasión en el sistema de buses de la capital. Según la última medición externa, el índice de evasión alcanzó el 44,04% en el segundo semestre de 2022.

Esta cifra representa un aumento de un 3,7% respecto al primer semestre de ese mismo año, cuando marcó un 40,3%; y de un 7,9% comparado con el segundo semestre de 2021, cuando fue de 36,1%.

Es, además, la segunda cifra más alta de evasión en la historia del sistema, después de la registrada en el segundo semestre de 2020, cuando el 46,2% de las personas no pagó su pasaje.

Esta medición se realiza sobre la base de una muestra de servicios regulares, preferentemente los días martes, miércoles y jueves de cada semana, entre las 06.00 y las 20.30 horas.

En noviembre del año pasado, el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones lanzó un plan antievasión, con un paquete de medidas que incluyen duplicar los controles a pasajeros y aumentar en un 43% las zonas paga, además de mejorar los sistemas de control de acceso a los buses, implementar nuevas tecnologías y educar.

Según informa la cartera, hasta marzo de 2023, se han realizado más de 75 mil controles de los 257 mil autoimpuestos, y se ha oficiado a las empresas para retomar el cierre de puertas traseras y realizar capacitaciones a los conductores.

Además, ya se han ejecutado un 40% de las zonas pagas y se ha intensificado la campaña para sumar más personas al pago digital o sistema de abono con cargo a cuenta bancaria de la tarjeta Bip. 1.645.000 personas y aestán enroladas en el pago QR, siendo usado en promedio por 290.325 usuarios en día laboral la última semana, lo que equivale al 9,32% de la recaudación.

En este contexto, el Ministerio de Transportes se comprometió a reducir la evasión a un 40% hacia fines de 2023.

«Hoy hemos recibido la nueva cifra de indicador de evasión del sistema, y que si bien no es la más alta que hemos registrado dentro de nuestras mediciones, nos tiene muy preocupados y ocupados. Es un indicador que refleja no solo un fenómeno complejo, sino que en los últimos semestres viene al alza. Esto no solo daña el sistema financiero que sostiene al transporte del Gran Santiago, sino también, representa acciones que no podemos aceptar ni queremos ver a la hora de abordar un bus o el metro, ni en nuestra sociedad», comentó el ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz.

Agregó que «ésta es una cifra que nos obliga a reforzar aún más los esfuerzos que hemos puesto en este tema y que estamos convencidos nos permitirán ir atacando un tema tan complejo como la evasión. Estamos trabajando para que nuestro plan quiebre esta tendencia al alza».

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