No son momentos tan dulces en el fútbol de Arabia Saudita. Pese a que elencos como el Al Nassr de Cristiano Ronaldo, el Al Hilal de Neymar o el Al Itthad de Karim Benzema, son operados por el PIF y no tienen problemas era seguir contratando a grandes estrellas del fútbol, hay otros que se las tienen que arreglar con lo que pueden.
Equipos como Al Qadsiah, que cuenta con la petrolera Aramco, una de las mayores empresas a nivel mundial en Asia occidental, no sufre problemas, algunos clubes afrontan una crisis deportiva. Mientras que en este mercado de verano, el Al Ittihad contrató a Moussa Diaby -procedente del Aston Villa a cambio de 60 millones de euros-, su vecino de la Meca el Al Wehda, apenas tiene una plantilla de 14 jugadores.
El verano pasado, Arabia sacudió el mercado europeo. Los dirigentes saudíes destinaron cerca de 1.500 millones de euros para traer a algunos de los mejores futbolistas del panorama europeo. Así fueron llegando Cristiano Ronaldo, Americ Laporte, Sadio Mané, Neymar, Karim Benzema, Ngolo Kanté, entre otros.
Pero la realidad de la mayoría de los clubes es distinta, mientras no se regularice la compra de jugadores de los equipos del PIF, seguramente se seguirán viendo estas demesiales diferencias entre unos y otros.
Por Ignacio Soto Bascuñán
