Todo lo expuesto en esta reseña parece el guion perfecto de una película de ciencia ficción. Sin embargo, la mujer que revela esta historia asegura haber atravesado el momento más dramático de su vida hace más de 30 años, cuando una nave alienígena la abdujo y un extraterrestre la embarazó.
La mujer en cuestión se llama Maria Cuccia y tiene 64 años. Ha escrito libros y hasta canciones sobre el suceso paranormal que vivió en 1992, en Long Island, Estados Unidos.
De acuerdo con una reseña de Daily Mail, el dramático testimonio de Maria Cuccia es apenas uno de los miles (o millones) de personas que aseguran haber sido abducidos por una nave extraterrestre.
El relato de Maria y su “hijo perdido”
Una noche de 1992, Maria cuenta que estaba dormida y de repente despertó y vio una luz en su ventana. Se sintió atraída por la luminosidad y acudió al lugar.
Mientras veía la luz, Cuccia sintió que una energía se metió en su cuerpo y de la nada se comenzó a elevar hacia la nave. Después de esto recuerda estar dentro de la estructura rodeada de seres altos, cuyos rostros dice no registrar en su memoria.
«Lo único que sé es que me ordenaron que mirara a una gran ventana de cristal, a lo que parecía una nave espacial. Miré por la ventana y vi lo que parecía ser un grupo de muchísimos niños“, dijo Maria al medio antes citado.
Los focos de iluminación se posicionaron sobre un niño de unos 8 años que comenzó a saludarla
“¿Es este mi hijo?”, preguntó Maria a los extraterrestres, según el testimonio del Daily Mail. “Este es su hijo, y lo llamamos Elijah”, le respondieron.
Despertó del sueño
De la nada regresó a su cama y le contó a su esposo lo que había pasado. Claramente, el hombre le dijo que había sido un mal sueño y nada más.
Maria Cuccia, ocho años atrás de aquella noche de 1992 había sufrido la pérdida de un bebé, producto de su segundo embarazo. El ginecólogo le había dicho que iba a tener un niño sano y dos días después sufrió un aborto espontáneo.
Los médicos sacaron el saco fetal, pero no había feto. Ella asegura que ese pequeño fue puesto por los extraterrestre y sacado posteriormente para continuar la gestación de manera artificial.
Sin embargo, para Maria no fue un sueño. La manera en cómo lo describe y cómo siente que lo vivió la hace sostener que estuvo en presencia de actividad extraterrestre.
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