El debate en Cooperativa entre Carolina Tohá (PPD) y Jeannette Jara (PC) encapsuló la creciente tensión dentro del oficialismo. Tras críticas de Jara al control portuario, Tohá replicó: «Me impresiona (…) que habla de los puertos como si viniéramos llegando de Marte». Jara contraatacó alertando sobre un «tono autocomplaciente» ante la inseguridad ciudadana.
Este episodio evidenció la fragilidad de la unidad gubernamental, justo cuando el Presidente Gabriel Boric intentaba cohesionar su coalición. En su Cuenta Pública, Boric enfatizó las «diferencias de proyectos» entre oficialismo y oposición, y días después reunió en Cerro Castillo a los partidos aliados (excepto FRVS) para impulsar una lista parlamentaria única en las elecciones. Expertos electorales y dirigentes, sin embargo, ven esta idea como «poco factible».
Quiebre Interno y Guerra de Estrategias
La unidad se resquebrajó rápidamente:
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Respaldos cruzados: Óscar Landerretche (PS) apoyó públicamente a Tohá, criticando al Frente Amplio (FA) y advirtiendo que le «costaría» votar por Jara o Winter en segunda vuelta.
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Franjas en conflicto: La aparición de exfiguras concertacionistas en la franja de Gonzalo Winter (FA) molestó al PPD-PS. El malestar escaló cuando el FA satirizó en «La mesa del poder» políticas de gobiernos anteriores (AFP, CAE), llevando a PS, PPD y Liberal a retirarse temporalmente del comité político en La Moneda.
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«Guerra de minutas»: El comando de Tohá distribuyó un documento estratégico centrado en el «voto útil», instando a «no responder ataques del FA» y alertando que «si gana Jara, gana la derecha». El PC rechazó la táctica, tachándola de «campaña del miedo que debilita la unidad».
Boric: El Gran Damnificado
Las encuestas, que sitúan a Jara liderando —escenario no previsto por La Moneda—, y el bajo desempeño de Tohá en debates («conflictos con rivales y enfoque técnico vs. emocional», según expertos), agravan la crisis. Para Axel Callís (Tú Influyes), Boric cometió un error al convocar una primaria sin bases sólidas: «Él entiende que lo que tiene no es una coalición política, sino culturas políticas distintas en un pacto electoral».
Marco Moreno (UCEN) profundiza: «La idea de dejar como legado la unidad (…) está dando cuenta de una dificultad estructural (…) Lo originalmente fue un pacto electoral (…) no ha logrado evolucionar en una coalición política con identidad programática común».
Con una aprobación del 34% (Cadem), Boric sufre el doble impacto: falta de unidad aliada y un debate centrado en su gestión, especialmente en seguridad. Callís sentencia: «El Frente Amplio es el gran damnificado (…) ha demostrado muy poca capacidad de presentar una propuesta armada. Eso salpica al Gobierno porque el Presidente es del FA».
En síntesis: La primaria no solo expone la fractura irreconciliable del oficialismo, sino que convierte a Boric en rehén de una coalición que nunca logró ser más que un frágil pacto electoral.
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