El reconocido economista y director de empresas, Klaus Schmidt-Hebbel, lanzó una crítica directa al Gobierno por la escasa holgura fiscal que se proyecta para la próxima administración, según el Informe de Políticas Públicas que acompaña al Presupuesto 2026. En conversación con Radio Infinita, el experto manifestó su preocupación por los límites que tendrá el siguiente gobierno para implementar nuevas prioridades, debido al ajustado margen fiscal que se heredará.

Sólo US$900 millones de flexibilidad: «Eso no alcanza»

Schmidt-Hebbel explicó que, de acuerdo al informe, el próximo gobierno solo podrá reasignar el 1% del gasto total, equivalente a US$900 millones, cifra muy por debajo de lo recomendado por expertos. “La comisión asesora, que llamó a Marcel para los gastos y el presupuesto, sugirió que ese monto fuese de US$9.000 millones”, afirmó, cuestionando la decisión del actual ministro de Hacienda.

El economista advirtió que esta limitación fiscal tendrá importantes consecuencias sociales y políticas:
“Esto impactará muchísimo al próximo gobierno debido a que habrán muchas prioridades que no podrá ejecutar por la falta de estos recursos”, advirtió. Además, explicó que se generará una presión financiera aún mayor para reducir el gasto, incluso por debajo de lo que proponen las campañas de la oposición:
“La obligación será cortar aún más el gasto para poder llegar a los objetivos de techo de deuda y del déficit estructural del 1,1% que propone este gobierno para el próximo año”, sentenció.

Evaluación de la economía: «El cierre de 2025 será malito»

En paralelo a sus críticas al diseño presupuestario, Schmidt-Hebbel entregó una pesimista visión del panorama económico para los próximos meses. A raíz del débil Imacec de agosto (0,5%), el economista calificó el desempeño proyectado para 2025 como «malito» y puso en duda la meta de crecimiento del 2,5% del PIB fijada por el gobierno.

“Será difícil que se cumpla con esa expectativa de crecimiento, y lo mismo aplica para 2026. Las proyecciones oficiales son demasiado optimistas”, indicó. Esto, según el experto, tiene efectos directos en el debate presupuestario, ya que sobreestimar el crecimiento económico también implica sobreestimar los ingresos fiscales.

Presupuesto sobreestimado: “Lo ha hecho particularmente mal”

Schmidt-Hebbel fue aún más duro al evaluar la calidad del diseño presupuestario del actual gobierno. Afirmó que existe una tendencia histórica desde el año 2000 a sobreestimar ingresos fiscales, pero que el actual Ejecutivo ha excedido incluso ese patrón:
“Este gobierno lo ha hecho particularmente mal”, afirmó tajantemente.

El economista subrayó que este tipo de errores no solo generan problemas de planificación, sino también efectos concretos sobre la deuda pública:
“Cuando ocurre el mismo año en el cual se ejecuta el presupuesto, es un problema porque significa que no llegamos a fin de año con las cifras proyectadas a comienzos de año. Los déficits son mayores, el endeudamiento es mayor, y la deuda sigue creciendo”, señaló.

Conclusión: Un presupuesto limitado que condiciona al próximo gobierno

Las declaraciones de Klaus Schmidt-Hebbel reflejan una profunda preocupación por el diseño fiscal y las proyecciones económicas del gobierno actual. Según el experto, la falta de holgura fiscal, la sobreestimación de ingresos y un débil crecimiento económico configuran un escenario que restringirá la capacidad del próximo gobierno para responder a nuevas demandas sociales y económicas.

/psg