“Esta asociación delictiva se mantuvo estable por, a lo menos, una década con prácticamente los mismos miembros. La forma de ejecutar las instrucciones, operar y comunicarse -las reglas de la organización- existieron por el mismo periodo, con una evidente distribución de tareas y funciones que canalizaran los designios e instrucciones del ex alcalde (Raúl) Torrealba, las que debían ejecutarse a como diera lugar”.

Este es uno de los pasajes de la ampliación de la querella presentada por la Municipalidad de Vitacura que hoy dirige la alcaldesa Camila Merino (Evópoli). La acción fue interpuesta una vez que sus abogados, liderados por el penalista Alejandro Espinoza, llegaron a la convicción de la autoría del ex jefe comunal en delitos de fraude al fisco y que él como autoridad lideró una asociación criminal que desvió dineros públicos a sus cuentas personales desde al menos el 2010 y hasta que dejó su cargo en 2020.

En el libelo -al que accedió La Tercera PM- se relata también cuál sería la cantidad defraudada que el fiscal Francisco Jacir ha logrado establecer hasta el momento y que será parte de lo que se exponga en la audiencia de formalización fijada para el 6 de junio. “Sobre la cuantificación del perjuicio, este asciende, a lo menos y de acuerdo al estado de la investigación, a la cantidad de 527 millones de pesos, consistentes en los depósitos de dinero en efectivo verificados en las cuentas corrientes del imputado Torrealba, desde el año 2010 hasta el año 2020. La referida cantidad puede verse alterada en atención a las diligencias de la investigación en curso”.

Sobre la base de esa cifra, en principio, es que el municipio se encuentra analizando ir a la justicia por la arista civil, para exigir su recuperación.

Esquema de corrupción

Merino expone en el documento redactado por sus abogados que “se ha narrado en esta querella hechos de la más alta gravedad, no sólo por constituir delito, también por tratarse de un esquema de corrupción en que ha intervenido el ex alcalde de una de las comunas más importantes del país”.

La acción criminal apunta también al abuso de confianza de la exautoridad que dejó el cargo, que ocupó durante 25 años, sólo una vez que una ley le impidió poder ir a la reelección. “Por años los vecinos de Vitacura tuvieron a la cabeza de la comuna a una persona que, abusando de la confianza democráticamente depositada en él, de su posición de poder y de sus facultades legales, construyó y mantuvo un esquema de corrupción para su exclusivo beneficio personal. El mal causado es inmenso, no sólo por la cuantía de lo defraudado, también por el atentado que significa a la fe pública depositada en las ex autoridades y funcionarios querellados”, se lee en el texto ingresado al Cuarto Juzgado de Garantía.

Ya el sábado 13 en entrevista con La Tercera, la alcaldesa Merino apuntaba a la gravedad de los hechos descubiertos por su administración y que lo sindican como autor principal a su antecesor en el cargo. “Aquí hubo todo un mecanismo que operó durante varios años, mecanismo para sacar plata de la municipalidad a través de estas organizaciones comunitarias para poderlas obtener y con fines que no eran los fines municipales (…) Que llegaron al final al exalcalde, a otras personas”.

A lo menos una década

Sobre el delito de fraude al fisco, en el que está querellado el CDE, la ampliación de la querella de Vitacura sostiene que dicho ilícito se encuentra reiterado. “Se ha relatado distintos hechos, como la entrega de sobres con dinero en efectivo se ha cometido, de acuerdo a los antecedentes de la carpeta y declaraciones de los mismos querellados, mes a mes, a lo menos desde el año 2010, esto es, desde hace más de 10 años”.

Pese a que en su declaración ante el Ministerio Público el exalcalde negó que los sobres con dinero en efectivo fueran a parar a sus arcas personales, la querella reitera que lo que hay detrás de este caso es una asociación ilícita y que él era el líder de la misma. “En los hechos existe una organización ilícita que excede con creces el simple acuerdo de voluntades para cometer crímenes y/o simples delitos. Se trata de una estructura conformada para colocar en práctica el esquema de corrupción ideado por los querellados, la que contaba con un solo jefe, el ex alcalde Raúl Torrealba del Pedregal, a quien todos los demás querellados debían subordinación y dependencia, y cuyas órdenes se cumplían sin cuestionamientos”, se detalla en el documento.

Junto con esto se afirma que de los hechos relatados se desprende que el objetivo de “esta organización criminal era la ejecución de hechos constitutivos de fraude al fisco, que permitieran a la cabeza de la misma -el querellado Torrealba- beneficiarse de fondos que se extraían de la Municipalidad de Vitacura por concepto de subvenciones municipales a las OCF Vita y el Consejo Local de Deportes, organizaciones que sólo sirvieron de medios para el cumplimiento de tal fin”.

Apuntan a Renato Sepúlveda y Felipe Guevara

La querella ampliada de la Municipalidad de Vitacura pide al Ministerio Público avanzar en otras aristas descubiertas en esta indagatoria. “Durante el curso de la indagatoria, han surgido antecedentes sobre hechos adicionales que deben ser pesquisados, y que en caso de ser necesario tras la realización de las diligencias pertinentes, serán objeto de una nueva ampliación de querella”, aseguran.

En ese punto ahondan en la declaración del imputado y exjefe de Finanzas, Domingo Prieto, que aseguró que cuando Felipe Guevara -quien luego fue alcalde de Lo Barnechea e intendente- dejó el cargo de director de desarrollo comunitario, “por instrucción de Renato Sepúlveda, se le debía pagar $2.000.000 mensuales, suma que salía de Vitadeportes y que se respaldaba con una boleta o factura que emitía un familiar de Felipe Guevara, por lo que recuerdo era su primo hermano que tenía su mismo apellido materno Stephens. Esta solicitud, venía directamente por instrucción del alcalde Raúl Torrealba”.

Otro antecedente que piden ahondar y que también fue negado por el exalcalde en su declaración como imputado fue otra revelación entregada por Prieto. “Tengo que señalar que, para la campaña a diputado del sobrino del alcalde de nombre Sebastián Torrealba Alvarado, el año 2016, no recuerdo mes, el director de DECOM Renato Sepúlveda, me solicitó que debíamos entregar mensualmente la cantidad de $1.500.000, a solicitud del alcalde Raúl Torrealba (tío del candidato), instruyéndome sacar el dinero de Vitadeportes, el cual se cobraba a través de un cheque siendo entregado en efectivo a Renato Sepúlveda en un sobre. Esto fue hasta que fue elegido diputado, fueron varios meses…”.

Para el Municipio de Vitacura, en su libelo, “se trata de hechos particularmente graves, por extender el esquema de corrupción instaurado por los querellados a otras personas que ocupaban altos cargos públicos, razón por la que es imperioso se investiguen y resulten aclarados”.

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