Antofagasta Minerals, del grupo Luksic, redujo su estimación para la producción de cobre este año debido a reprogramaciones en la puesta en marcha del proyecto de Infraestructura Complementaria (INCO) de Minera Los Pelambres y a la persistente sequía en la región de Coquimbo.

La compañía, que opera en el país los yacimientos Los Pelambres, Centinela, Zaldívar y Antucoya. ahora proyecta una producción de cobre fino para 2023 de un rango entre 640.000 a 670.000 toneladas, con un costo neto de caja de US$1,65 la libra, después de créditos por subproductos.

La proyección previa, realizada en abril, era de alcanzar entre 670.000 y 710.000 toneladas de cobre fino, también a un costo neto de caja de US$1,65 la libra.

“A raíz de las constantes e intensas marejadas asociadas al fenómeno climático de El Niño, en el último trimestre hubo reprogramaciones en las actividades de término de las obras marinas de la planta desalinizadora que Minera Los Pelambres está construyendo en Los Vilos, las que ahora se encuentran prácticamente finalizadas. Asimismo,se ha requerido un tiempo adicional para completar la ampliación de su planta concentradora”, explicó Arriagada.

El ejecutivo precisó que ambos proyectos terminarán su puesta en marcha durante el segundo semestre. “Debido a estas condiciones y a la falta de lluvia, hemos actualizado las estimaciones de producción para este año”, añadió.

Inversiones

Arriagada ratificó que la compañía espera invertir US$1.900 millones este año. Además de iniciativas para asegurar el correcto funcionamiento de sus operaciones, estos recursos permitirán terminar la construcción del proyecto INCO de Minera Los Pelambres, dijo la compañía.

La minera informó que durante junio la planta desalinizadora produjo en promedio 160 l/s de agua y que en los próximos meses alcanzará su capacidad de diseño de 400 l/s.

Por otra parte, Antofagasta Minerals confirmó que ya recibió los fondos de la venta de su participación en el proyecto Reko Diq (US$945 millones).

Respecto al mercado internacional, Arriagada dijo que “estamos observando una resiliencia en la demanda por el cobre, a medida que se sigue avanzando en la meta global de descarbonización”.

Añadió que el cobre es un metal esencial para esta transición energética, lo que sustenta la aspiración de la compañía de lograr una producción anual de 900.000 toneladas en los próximos años.

Alza en lo que va del año

En el primer semestre Antofagasta Minerals produjo en sus cuatro yacimientos 295.500 toneladas de cobre fino, lo que representó un aumento de 10% respecto al mismo periodo del año anterior.

La cifra se desglosa en 145.900 toneladas correspondientes al primer trimestre y 148.900 del segundo trimestre.

En tanto la producción de oro en los primeros seis meses del año fue de 86.200 onzas y la de molibdeno llegó a 4.900 toneladas.

En cuanto a los costos, en comparación al primer semestre de 2022, el presidente ejecutivo de Antofagasta Minerals, Iván Arriagada, señaló que “el costo neto de caja disminuyó a 1,75 US$/lb durante esta primera mitad del año a pesar de las presiones inflacionarias, lo que refleja la efectividad de nuestros esfuerzos en el control de costos”.

La cifra fue menor en 3,8% a los US$1,82 por libra de los primeros seis meses de 2022.

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