La vejez trae consigo cambios importantes en nuestro cuerpo. Cada año que pasa, nuestro cerebro y demás órganos comienzan a funcionar distinto, no obstante, la alimentación y estilo de vida son hábitos que pueden ralentizar el deterioro de nuestra salud.

En esta línea, la memoria es una de nuestras habilidades que más le preocupa a muchas personas. Y es que en la vejez, es común que comience a fallar.

Es por esto que los expertos recomiendan consumir alimentos antioxidantes que protejan a las células del cerebro. Al hablar de este tipo de productos, los frutos rojos siempre entran a la discusión, pues son bien conocidos por su capacidad de evitar la oxidación celular.

Sin embargo, entre los distintos tipos de frutos rojos que existen, hay uno que pareciera ser el más valorado para cuidar la memoria y otras funciones cerebrales: el arándano.

Por qué deberías comer arándanos para cuidar y mejorar tu memoria

Los arándanos, esas frutas redondas y pequeñas de color azul y morado, son frutos rojos que tienen un sabor dulce y ligeramente ácido. Suelen estar presentes en los desayunos, acompañados de avena u otros cereales, e incluso en algunas ensaladas.

En esta línea, la doctora experta en nutrición de la Universidad de Harvard, Uma Naidoo, reveló que “comer alimentos que estimulan el cerebro puede disminuir significativamente el riesgo de desarrollar problemas neurológicos, mejorar la salud mental y ayudar a mantenerse alerta y concentrado”.

“A través de mis años de investigación, descubrí uno que es el más beneficioso cuando se trata de ayudar al cerebro a envejecer bien, los arándanos”.

Junto con lo anterior, según una nota de Infobae, las propiedades que harían de los arándanos los aliados perfectos para evitar la pérdida de la memoria y el deterioro cognitivo son:

  1. Son antioxidantes. Los arándanos tienen flavonoides y antocianinas, compuestos que combaten el estrés oxidativo y la inflamación del cerebro.
  2. Mejoran la comunicación neuronal. Los compuestos en los arándanos mejoran la comunicación entre células cerebrales, ya que los antioxidantes ayudan a mantener las sinapsis saludables. Esto protegería la capacidad de aprender y de memorizar.
  3. Reducen la inflamación. Es sabido que, muchas veces, el daño al tejido cerebral es a raíz de la inflamación crónica, lo que puede resultar en enfermedades neurodegenerativas. Los arándanos son antiinflamatorios.
  4. Tienen un efecto neuroprotector. Distintos estudios arrojaron que los efectos neuroprotectores de los arándanos pueden reducir significativamente el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas, como la demencia y el Alzheimer.
  5. Mejoran el flujo sanguíneo del cerebro. El consumo habitual de arándanos puede mejorar la circulación y flujo sanguíneo al cerebro, para que así este órgano pueda funcionar de forma óptima.

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