En forma exitosa culminó el proyecto “Plantemos un árbol, sembremos vida”, cuyo objetivo fue integrar a los adultos mayores en acciones medioambientales y aportar en la conservación de nuestra naturaleza, mediante la plantación de especies nativas.

El proyecto ejecutado por el Centro Cultural Cristiano y Juvenil Nehuén en conjunto con la Corporación Nacional Forestal y la Fundación Las Rosas, fue financiado a través del Fondo 6% FNDR para proyectos de Cultura; Deporte; Seguridad Ciudadana; Fondo Social, Discapacidad e Inclusión y Adulto Mayor, y Protección del Medio Ambiente y Educación Ambiental, del Gobierno Regional Metropolitano de Santiago, y aprobada por el Consejo Regional Metropolitano, Core.

La actividad de cierre se llevó a cabo el pasado 20 de diciembre en el Centro  Integral del Adulto Mayor, ubicado en calle Las Araucarias #465, comuna de Curacaví, donde se realizó la plantación de dos quillay, especies nativas.

El proyecto “plantemos un árbol, sembremos vida”, cuya duración fue de siete meses tuvo por finalidad integrar a los adultos mayores a la sociedad mediante la temática ambiental, al tiempo de realizar acciones en favor de la comunidad, a través de la plantación de diversas especies.

Las actividades que consistieron fundamentalmente en talleres para los mayores, así como plantaciones se llevaron a cabo en las comunas de El Bosque, Isla de Maipo, Recoleta, San José de Maipo, Curacaví, Independencia y La Florida.

Los talleres  desarrollados, nueve en total, tres en cada una de las comunas escogidas, El Bosque, Independencia y La Florida, integraron a los adultos mayores con actividades lúdicas y muy participativos, tratando de responder preguntas como; ¿qué pueden aportar las personas mayores a la sostenibilidad?, ¿qué aspectos del medio ambiente y la educación ambiental pueden ser atractivos para las personas mayores?, ¿qué dificultades encuentran las personas mayores y sus organizaciones para emprender iniciativas de educación ambiental?

En tanto que las plantaciones, diez en total,  se realizaron gracias al aporte de la Corporación Nacional Forestal, CONAF, entidad que donó las especies nativas, las que se plantaron en diferentes Clubes sociales y/u hogares de ancianos de Fundación Las Rosas. En las plantaciones participaron directamente los adultos mayores, quedando los árboles a cargo de los propios abuelitos, supervisados por los ejecutores del Programa.