Estamos seguro de que habrás visto alguna vez el programa Ancient Aliens, en el que cada episodio explora la posibilidad de que los antiguos extraterrestres hayan tenido contacto y quizás incluso hayan vivido entre civilizaciones antiguas. Expertos e investigadores han ido presentado evidencias fotográficas y arqueológicas de que existieron los conocidos como antiguos astronautas, por ejemplo el cráneo alargado de Akhenaton, las famosas pirámides de Egipto, la puerta de Puma Punku, la belleza de la Isla de Pascua, jeroglíficos antiguos en Marte, el Stonehenge, las líneas de Nazca en Perú, arquitectura de Vijayanagara Vastu, o los edificios de Chichén Itzá.
Pero tambien han hablado sobre la arquitectura en el Museo Nacional de Irak. Hay varios objetos de cerámica antigua exhibidos en el Museo Nacional de Irak en Bagdad que muestran figuras extraterrestres en ellas. Algunas de estas cerámicas se remontan al año 6.000 a.C. y los historiadores no están seguros de qué o a quién representan las figuras, pero una cosa es segura: los creyentes de Ancient Aliens lo usan como prueba de la antigua existencia alienígena. Pero ahora tenemos una nueva evidencia.
Huella de mano extraterrestre
Se ha descubierto una misteriosa huella de mano tallada en un antiguo foso seco que una vez rodeó la Ciudad Vieja de Jerusalén hace 1.000 años, y su significado ha desconcertado a los investigadores. Los arqueólogos descubrieron la huella mientras excavaban alrededor de un proyecto de infraestructura para expandir un camino cerca de la Puerta de Herodes, que inicialmente descubrió parte del foso. Si bien la función del foso es clara, impidió que los cruzados invadieran la ciudad santa, la mano tallada sigue siendo todo un misterio.
“¿Simboliza algo? ¿Apunta a un elemento cercano específico? ¿O es solo una broma local? El tiempo lo dirá”, dijeron los investigadores.
El enorme foso fue tallado en la piedra alrededor de la Ciudad Vieja, se extiende 10 metros de ancho y entre 6 metros de profundidad. Según la Autoridad de Antigüedades de Israel (IAA), los cruzados en 1099 necesitaron cinco semanas para cruzarlo y romper las murallas y defensas de la ciudad. Pero aún no saben el verdadero origen de la misteriosa mano.
“Es un misterio, tratamos de resolverlo”, dijo Zubair Adawi, director de excavación de IAA, en un comunicado.
Los arqueólogos de IAA no están seguros de quién talló la mano en la roca o su significado. Las impresionantes murallas y puertas de la Ciudad Vieja visibles en la actualidad fueron construidas en el siglo XVI por el sultán otomano turco Solimán I, el Magnífico.
“Los muros de fortificación anteriores que rodeaban la antigua ciudad de Jerusalén eran mucho más fuertes”, dijo el Dr. Amit Re’em, director de IAA en la región de Jerusalén.
Para que los cruzados atacaran la ciudad, el grupo tuvo que cruzar el foso y escalar dos gruesos muros que los rodeaban, que estaban protegidos por sus oponentes, que arrojaban fuego y azufre desde la parte superior.
“Como si esto no fuera suficiente, había túneles secretos en las fortificaciones, algunos de ellos descubiertos por los arqueólogos de la IAA en excavaciones anteriores, por los cuales los defensores de la ciudad podían emerger al foso y atacar al enemigo por sorpresa, y luego desaparecer de nuevo en la ciudad”, continuó explicando el Dr. Re’em.
Las Cruzadas fueron algunas de las batallas más sangrientas de la Edad Media, que fueron una serie de guerras religiosas que se libraron entre 1.095 y 1.291, en las que los invasores cristianos lucharon para reclamar el Oriente Próximo. Los cruzados tenían dos objetivos: liberar a los cristianos orientales de los musulmanes y al Santo Sepulcro de los musulmanes.
Los primeros cristianos medievales iban a Jerusalén como un acto de peregrinaje para la remisión de sus pecados. Dado que los cruzados también estaban ayudando a Dios al liberar su tumba de los musulmanes, podrían haber contado la guerra como una peregrinación. Sylvia Schein, una reconocida experta en historia y política de los Estados Cruzados, que murió en 2004, creía que el objetivo de la Primera Cruzada era liberar el Santo Sepulcro en Jerusalén. El Papa Urbano, quien murió en 1.009, originalmente preparó la cruzada como una forma de ayudar a los bizantinos, pero cedió a la opinión popular e hizo una guerra para rescatar a Jerusalén.
Independientemente de la historia sobre el foso y los cruzados, son muchos los que opinan que esta huella sin duda alguna pertenece al de un ser extraterrestre. Y más concretamente, consideran que se trata de una especie de llave, y en el momento en que un ser coloque su mano se abrirá un portal interdimensional, que permite cruzar el espacio-tiempo. Es más, habría cientos de portales similares en todo el mundo.
¿Qué opinas sobre la misteriosa huella? ¿Pertenece a la mano de un ser extraterrestre?
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