El presidente de Argentina, Javier Milei, reconoció que todavía no sabe cuándo terminará la crisis económica que ha llevado a casi la mitad de la población a vivir en condiciones de pobreza.

«Lo primero que hay que entender es que usted en economía no tiene milagros», dijo el mandatario en una entrevista con la BBC en la que contradijo sus recurrentes promesas de que la recuperación comenzará a más tardar en el segundo semestre de este año.

Milei aseguró que la inflación ya está a la baja y que los salarios y las jubilaciones se van a recomponer, aunque se negó a establecer plazos que tranquilicen a la población.

«Si hubiéramos mantenido las políticas populistas, hoy tendríamos una inflación en torno al 15,000 % y tendríamos cerca del 95 % de pobres y 60 % de indigentes», dijo, a pesar de que nunca ha mostrado los estudios en los que se basa para difundir los escenarios catastrofistas que, según él, evitó.

La periodista Ione Wells le preguntó de manera insistente qué le diría a una jubilada o a los ciudadanos que la están pasando mal debido a las medidas que aplicó desde que comenzó a gobernar el pasado 10 de diciembre. También lo cuestionó acerca de si les pediría más tiempo o les daría las gracias por esperar.

Sin embargo, el presidente se negó a humanizar el análisis y se limitó a hablar en términos macroeconómicos.

«El agente»

Milei también minimizó la inconformidad de parte de la población en contra del drástico ajuste del gasto público que es el eje de su política económica y que ha afectado principalmente a las jubilaciones.

«Usted siempre puede encontrar un caso donde se va a quejar», a lo que la periodista le reviró si una jubilada miente cuando dice que tiene dificultades para comprar sus provisiones básicas en el supermercado.

«El punto es el siguiente: usted no puede hacer una evaluación macroeconómica por la situación particular de un agente», respondió el mandatario al despersonalizar con términos económicos a la mujer a la que se referían.

«Usted no puede hacer magia», insistió Milei para justificar la crisis y al recordar que recibió un país que ya estaba en deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que padeció hiperinflaciones.

En ese contexto, agregó, no se puede lograr un clima de confianza y de inversiones inmediatas. «Entonces usted en el corto plazo va a sufrir las consecuencias de una recesión. Y eso es lo que ocurrió en la última parte del año anterior hasta ahora», señaló al tratar de explicar el retraso en las mejoras.

El presidente agregó que la economía argentina tocó piso entre marzo y abril y que algunos sectores ya están creciendo, como es el caso de minería, petróleo, gas, y el agropecuario.

Por eso, afirmó, «muchos economistas» sostienen que Argentina podría estar saliendo de la crisis en la forma de una V corta, es decir que después de tocar fondo repuntará de manera sostenida.

«Pero usted no puede hacer milagros», advirtió para morigerar las expectativas.

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