La candidata presidencial del oficialismo, Jeannette Jara (PC), tuvo un rol protagónico en el Gobierno del Presidente Gabriel Boric durante su paso por el Ministerio del Trabajo. Bajo su liderazgo se aprobaron varias reformas clave, que La Moneda ha destacado como logros.

Entre estas transformaciones se encuentran la ley de 40 horas, que reduce gradualmente la jornada laboral hasta llegar a ese umbral en 2028; la Ley Karin, que fortalece los mecanismos contra el acoso laboral, sexual y la violencia en el trabajo; y el aumento del salario mínimo, que ya llegó a los $529 mil y que alcanzará los $539 mil en enero.

Además, impulsó una reforma de pensiones que eleva la Pensión Garantizada Universal (PGU) a $250 mil e introduce una nueva cotización del 7% a cargo de los empleadores, distribuida entre cuentas individuales y un Seguro Social.

Críticas al impacto económico de las reformas

Sin embargo, las reformas laborales han sido objeto de duras críticas, especialmente desde sectores que monitorean el mercado laboral. Se les acusa de encarecer la contratación y de poner trabas a las pequeñas y medianas empresas.

Incluso el Banco Central advirtió en su último Informe de Política Monetaria (IPoM) que los costos laborales han crecido significativamente, con una variación anual de 8,5% en abril. Además, señaló que muchas empresas están preocupadas por el futuro del empleo.

Las alarmantes cifras del desempleo

Esta semana, las cifras parecieron confirmar los peores augurios. El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la tasa de desocupación alcanzó un 8,9% en el trimestre marzo-mayo, 0,6 puntos porcentuales más que hace un año.

  • Desempleo femenino: 10,1%, el más alto en cuatro años.

  • Puestos de trabajo creados: apenas 14 mil en doce meses.

  • Región Metropolitana: 9,5% de desocupación, 0,9 puntos más que en 2023.

El economista Juan Bravo, director del OCEC UDP, calificó como «alarmante» el desempleo femenino:

“Aunque la participación sube, muchas mujeres no logran emplearse. Eso explica el alza en el desempleo”, señaló.

¿Son las reformas responsables?

Entre los economistas parece haber consenso: las reformas impulsadas por el Ejecutivo han tenido un impacto negativo en el mercado laboral.

Tomás Rau, profesor del Instituto de Economía UC, tildó las cifras del INE como «paupérrimas»:

“Apenas se crearon 14.650 empleos en un año, lejos del promedio histórico de 160 mil. Estas cifras son reflejo de medidas que han elevado los costos laborales y desincentivado la contratación.”

Ingrid Jones, economista de LyD, coincidió en el diagnóstico:

“La agenda laboral del Ejecutivo ha encarecido el empleo, acumulando un incremento real cercano al 20% en los costos laborales.”

Jones apuntó especialmente al aumento del salario mínimo, asegurando que fue superior a la productividad y a la inflación, lo que llevó a las empresas a reducir su dotación para enfrentar las nuevas exigencias.

Por su parte, Cecilia Cifuentes, directora del Centro de Estudios Financieros del ESE, advirtió una combinación peligrosa:

“El avance tecnológico y el encarecimiento de la mano de obra producto de las reformas están golpeando fuerte al empleo.”

Felipe Balmaceda, académico de la UNAB, fue más crítico aún:

“Este gobierno tiene una visión laboral anticuada, de los años 60 y 70. No entienden que hoy se requiere un mercado flexible, donde sea fácil comenzar y terminar una relación laboral.”

Finalmente, David Bravo, director del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales UC, recordó que:

“Llevamos casi 30 meses con tasas de desempleo sobre el 8%. Esto debería ser tratado como una crisis laboral. Jeannette Jara fue ministra del Trabajo y no se ha asumido la responsabilidad. En cualquier otro periodo, esto habría sido un escándalo político”.

/psg