El exdirector del FBI, James Comey, fue acusado formalmente de dos delitos federales graves, ambos presuntamente cometidos en el contexto de la investigación sobre la posible colusión entre Rusia y la campaña presidencial de Donald Trump en 2016.

La imputación fue hecha pública el pasado jueves 25 de septiembre, marcando un nuevo capítulo en la prolongada tensión política entre Comey y el expresidente Trump, quien lo ha calificado en repetidas ocasiones como su “némesis”.

Los cargos contra Comey

Los dos delitos imputados al exfuncionario, según la fiscal Lindsey Halligan —exabogada personal de Trump y actual fiscal del Distrito Este de Virginia— son los siguientes:

  1. Obstrucción del procedimiento del Congreso, por su testimonio ante el parlamento en 2020.

  2. Declaración falsa al Congreso, relacionada con su comparecencia en 2017.

¿Qué habría hecho Comey?

De acuerdo al documento presentado por el Departamento de Justicia, Comey habría mentido bajo juramento en dos oportunidades:

  • En 2017, declaró ante el Congreso que no había autorizado filtraciones a la prensa desde el FBI sobre la investigación de la presunta interferencia rusa.

  • En 2020, reafirmó ese testimonio diciendo: “Solo puedo hablar de mi testimonio. Me reafirmo en el testimonio que usted resumió, el cual presenté en mayo de 2017”.

Sin embargo, el Departamento de Justicia asegura que Comey sí había autorizado a un contacto suyo a actuar como fuente anónima ante medios estadounidenses durante ese período. Esto, afirman, constituiría obstrucción y falsedad intencional ante el Congreso.

Trump celebra y ataca a Comey

Desde su red social Truth Social, el expresidente Donald Trump celebró la acusación con un mensaje en mayúsculas: “¡JUSTICIA EN ESTADOS UNIDOS!

En publicaciones posteriores, Trump calificó a Comey como:

  • Uno de los peores seres humanos que este país ha conocido”.

  • El exdirector corrupto del FBI”.

La relación entre ambos ha sido extremadamente conflictiva desde que Trump despidió a Comey en 2017, en medio de la investigación por la injerencia rusa en las elecciones.

Comey responde: “No viviremos de rodillas”

A través de su cuenta de Instagram, James Comey entregó una declaración en respuesta a los cargos: “Mi familia y yo sabemos desde hace años que enfrentarse a Donald Trump tiene un precio. Pero no nos imaginamos viviendo de otra manera. No viviremos de rodillas, y tú tampoco deberías hacerlo”.

Además, expresó confianza en el sistema judicial y reiteró su inocencia: “Me duele el corazón por el Departamento de Justicia, pero tengo una gran confianza en el sistema judicial federal. Y soy inocente. Así que, que tengamos un juicio”.

Un caso sin precedentes

Con esta imputación, James Comey se convierte en el primer alto funcionario estadounidense acusado formalmente en relación con la supuesta interferencia rusa en las elecciones de 2016, una investigación que dividió profundamente a la opinión pública y puso bajo escrutinio a múltiples instituciones del país.

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