El cuadro fiscal se tensiona. Ese es el diagnóstico inicial de los expertos tras conocerse que en octubre los ingresos del Fisco cayeron 10,7% real anual, alcanzando una recaudación de $5.888.127 millones.
Según el Informe de Ejecución Fiscal de la Dirección de Presupuestos (Dipres), la baja se explica principalmente por el retroceso de los ingresos tributarios de contribuyentes no mineros (-9,4%), debido a una alta base de comparación asociada a una operación extraordinaria que elevó el IVA en octubre de 2024.
Dipres sostiene que, ajustando ese efecto, los ingresos tributarios de contribuyentes no mineros habrían crecido 1,6% y los ingresos totales habrían caído 4,3%.
Ingresos tributarios y no tributarios: los factores del retroceso
El informe detalla que el impuesto a la renta subió 10,2%, impulsado por el aumento de los PPM (11,3%), aunque compensado parcialmente por una caída de 14,9% en los impuestos de declaración mensual.
La tributación de la minería privada (GMP10) mostró un incremento de 34,1%, mientras que la del impuesto específico a los combustibles cayó 29,5%.
En cuanto a los ingresos no tributarios, las imposiciones previsionales crecieron 51,3%, pero las rentas de la propiedad bajaron 53%, debido al cambio en el calendario de pago de dividendos de empresas públicas, que este año se efectuaron en noviembre.
Aun así, los ingresos del gobierno acumulan a octubre un aumento de 4,8% anual, influido por el crecimiento de los ingresos tributarios totales (5,9%).
La directora de Presupuestos, Javiera Martínez, explicó que la caída de octubre responde a un efecto puntual del IVA del año previo. Aseguró que, tras el ajuste por dicha base, los ingresos totales habrían crecido 5,6% y los tributarios 6,9%.
Añadió que los datos preliminares de noviembre indican que la situación debería revertirse.
La meta fiscal se complica: riesgo de sobreestimación por US$2.000 millones
El último Informe de Finanzas Públicas proyecta ingresos por $75.010.477 millones en 2025 (22,4% del PIB), lo que equivale a un crecimiento de 6,8% real. Sin embargo, el frenazo de octubre amenaza esa proyección.
Los economistas calculan que para cumplirla los ingresos entre noviembre y diciembre deberían crecer cerca de 22%. De no ocurrir, habría una sobreestimación de aproximadamente US$2.000 millones.
El exdirector de Presupuestos, Matías Acevedo, advirtió que la recaudación necesaria para cerrar el año es “prácticamente inalcanzable”, por lo que estima un déficit efectivo de 2,5% del PIB (versus el 2% proyectado por Hacienda). Actualmente, el déficit llega a 2,3% del PIB, equivalente a $7.708.284 millones.
La economista Margarita Vial (USS) sostuvo que la variación real necesaria supera el 20%, y que la caída esperada en ingresos podría comprometer la base de recaudación del Presupuesto 2026. Calcula también una disminución cercana a US$2.000 millones y un déficit estructural que podría llegar al 2,5% del PIB (superior al 2,2% proyectado).
Desde Libertad y Desarrollo, Macarena García coincidió en que cumplir con la meta es “muy difícil”, proyectando igualmente un déficit estructural sobre el 2,5%.
El gasto público también se expande
En octubre, el gasto público creció 9,1% real anual.
El gasto corriente avanzó 6,6%, impulsado por subsidios y donaciones, además del gasto en personal.
El gasto de capital aumentó 25,7%, principalmente por mayores transferencias de capital.
A octubre, el gasto total acumula un incremento de 3,6%, con una ejecución del 81,9% del presupuesto aprobado.
Dotación del Estado aumenta por expansión de Educación
El Informe de Recursos Humanos del Sector Público (III trimestre) reveló que la dotación del Gobierno Central alcanzó 534.807 cargos, un alza de 10,8% (52.254 puestos) respecto a 2024.
El aumento se explica casi en su totalidad por los Servicios Locales de Educación Pública (SLEP), que incorporaron 48.666 cargos, equivalentes a un crecimiento de 103,7%, representando el 93,1% de la variación total. Esto responde al avance en la implementación de los SLEP y a la incorporación del personal traspasado desde municipalidades en 2025.
Los Servicios de Salud sumaron 1.873 cargos (+0,8%), mientras que el resto de las instituciones del Gobierno Central creció en 1.715 puestos (+0,8%).
A septiembre de 2025, el sector público totalizó 1.112.112 cargos.
La distribución es la siguiente:
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Administración Central: 45,8%
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Municipalidades: 42,2%
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Universidades y CFT estatales: 5,4%
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Empresas públicas: 4,2%
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Organismos autónomos: 2,3%
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Otras instituciones: 0,1%
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